SUIZA.– La guerra en Yemen ha causado la muerte o amputación de 10.000 niños desde marzo de 2015, cuando empezaron los enfrentamientos entre el movimiento rebelde de los hutíes y una coalición militar liderada por Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos.
«En Yemen un niño muere cada diez minutos por una causa prevenible», que en todos los casos guarda relación con las consecuencias de la guerra, dijo hoy en Ginebra el portavoz de Unicef, James Elder.
Durante este conflicto, una parte de la población ha estado sometida a un bloqueo comercial organizado por Arabia Saudí, lo que ha sido uno de los principales factores que llevó a un aumento exorbitante del precio de los alimentos y provocó que millones de personas, incluyendo al menos 4000.000 niños, sufran de malnutrición aguda.
Las organizaciones humanitarias estiman que unos cinco millones de yemeníes están a un paso de la hambruna.
Con el paso de los años la situación ha cambiado y «los niños ahora sufren hambre no porque no haya alimentos, sino porque sus familias no tienen medios para comprarlos», sostuvo el portavoz.
Elder recordó que actualmente unos 15 millones de personas en Yemen tampoco tienen acceso a agua apta para el consumo, a servicios de saneamiento o higiene elemental.
Yemen ya era uno de los países más pobres del mundo antes de la guerra, pero ahora millones dependen exclusivamente de la ayuda internacional que, en el caso de la que aporta la ONU y las oenegés con las que trabaja, podría tener que ser recortada por los escasos fondos internacionales que está recibiendo para continuar con esta tarea.
Elder dijo a los periodistas que Unicef, la agencia de Naciones Unidas dedicada a la defensa de la infancia, tendrá que reducir o interrumpir su asistencia a los niños más vulnerables en caso de que no reciba los 235 millones de dólares que requiere para continuar con sus actividades en Yemen hasta mediados de 2022.
«Pero aún si recibimos apoyo, la guerra debe terminar. Yemen es el lugar más difícil para un niño y, aunque parezca increíble, la situación empeora», aseguró.