SANTO DOMINGO.- Los 10 oficiales de la Policía detenidos por el supuesto robo de 900 mil municiones de la uniformada se encuentran en la cárcel del Palacio de Justicia a la espera de que el Ministerio Público solicite medidas de coerción en su contra.
El grupo de oficiales de la policía nacional detenidos con la puesta en marcha de la Operación Pandora han recibido desde tempranas la visita de algunos abogados, que prefirieron no hablar con la prensa.
El caso ha generado indignación en la uniformada, según indicó la ministra de Interior y Policía, quien reconoció que el caso era más grande de lo que pensaban.
Según el Ministerio Público, la supuesta red criminal era encabezada por el coronel de la Policía, Narciso Antonio Féliz Romero, que dirigía la Intendencia de Armas de dicha institución.
Al igual que Feliz Romero, también fueron apresados el subintendente Juan Miguel Pérez Soler; el capitán Nelson Valdez, responsable del Depósito de Armas, Municiones y Pertrechos; así como el capitán y auditor Víctor Manuel Santos, quien, según los fiscales, alteró los resultados de una auditoría realizada en febrero para ocultar la sustracción de cientos de municiones.
A ellos se suma el segundo teniente Marino Antonio Rodríguez Toribio, armero de la Dirección Regional Cibao Central; el sargento mayor Miguel Ángel Gómez Espaillat; el cabo Juan Luis Díaz Medina; los rasos Rubiel Martínez (alias Escobar) y Moreibin Medina Pérez, así como la imputada Miguelina Bello Segura.
Según los fiscales, estos últimos fungían como piezas clave en la parte operativa de la organización criminal.
De acuerdo con una nota de prensa del Ministerio Público durante las pesquisas fueron incautadas armas, proyectiles, evidencias digitales, cientos de transacciones económicas, pruebas testimoniales y datos extraídos de dispositivos electrónicos.
Se tiene previsto que sea esta noche cuando el Ministerio Público deposite la solicitud de medida de coerción en contra de los arrestados por el caso.