La vida del fenecido presidente Joaquin Balaguer

Balaguer comenzó su carrera política en 1930 (antes de que Trujillo tomara el control del gobierno), cuando fue nombrado Fiscal. Más tarde se inscribe en el Partido Dominicano y así pasó a formar parte del círculo de los colaboradores cercanos del dictador Rafael Trujillo.

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Una serie de tres entregas sobre la vida del fenecido presidente Joaquín Balaguer Ricardo. El período comprendido entre su nacimiento y el papel que desempeñó en la férrea dictadura de 30 años, de Rafael Trujillo Molina.

El abogado, político y escritor dominicano Joaquín Balaguer nació el 1 de septiembre de 1906, en Villa Bisonó, mejor conocido como Navarrete, un municipio de la provincia Santiago.  Hijo de Joaquín Balaguer Lespier, puertorriqueño de padre catalán y madre de origen francés y Carmen Celia Ricardo Heureaux quien era prima del presidente Ulises Heureaux,

Se recibió de Bachiller en ciencias sociales en 1916, en Santiago de los Caballeros. Posteriormente realizó estudios superiores en la Universidad Autónoma de Santo Domingo continuando su perfeccionamiento en la Facultad de Derecho de la Sorbona en París en 1934.

Balaguer comenzó su carrera política en 1930 (antes de que Trujillo tomara el control del gobierno), cuando fue nombrado Fiscal. Más tarde se inscribe en el Partido Dominicano y así pasó a formar parte del círculo de los colaboradores cercanos del dictador Rafael Trujillo.

Durante la Era de Trujillo se desempeñó como Secretario de la Legación Dominicana en Madrid (1932-1935), Subsecretario de la Presidencia (1936), Subsecretario de Relaciones Exteriores (1937), Embajador Extraordinario de Colombia y Ecuador (1940 al 47 ), Embajador en México (1947-1949), Secretario de Educación (1949-1955), y Secretario de Estado de Relaciones Exteriores (1955-57).

Balaguer fue visto alternativamente tanto como empleado del régimen y como un distinguido colaborador cercano a Trujillo. A pesar de que Trujillo disfrutaba humillando e insultando sus «sirvientes» en público, el dictador nunca trató de degradar a Balaguer.

Balaguer reciprocó ese respeto hacia Trujillo durante los treinta años de dictadura, sin parecer perturbado ni mostrar el menor gesto de disgusto por los excesos y aberraciones que eran comunes en aquella época.

Balaguer fue un fiel y callado servidor de la dictadura, se elevo desde maestro de escuela hasta la Presidencia de la República, era un notable orador, escribía los discursos del Dictador. Fue una de las pocas personas de las que Trujillo escuchó consejos

 

Cuando Trujillo dispuso que su hermano Negro fuera reelegido a la presidencia en 1957, optó por Balaguer como vice-presidente. Tres años más tarde, en 1960, cuando la OEA convenció al dictador de que no era apropiado tener a un miembro de su familia como presidente, Trujillo obligó a su hermano a renunciar, y Balaguer le sucedió en el cargo. En una próxima entrega, ampliaremos esta historia.