DUARTE.- Cuatro procuradores fiscales, nueve fiscalizadores, un abogado, cinco secretarias y un mensajero de la Fiscalía del Distrito Judicial de San Pedro de Macorís denuncian que son maltratados, hostigados, vejados y descalificados por las magistradas al frente de esa fiscalía.
La denuncia es contra la titular interina de esa fiscalía, Antonia Idalia Jiménez Estévez y la coordinadora de la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y de Delitos Sexuales, Olga Lidia Coss.
En el informe enviado a la procuradora general de la República, Miriam Germán Brito, explican que Jiménez Estévez fue designada por el Consejo Superior del Ministerio Público, entonces dirigido por Fernándo Quezada quien resaltó las «supuestas cualidades de las cuales gozaba dicha fiscal, pero que ha demostrado en su accionar carecer de las mismas».
Aseguran que la magistrada Jiménez «considera a los empleados sus enemigos, personas corruptas sin motivo alguno» y agrega que esta está «obsesionada con demostrar una supuesta honestidad de la cual se vanagloria. Poniendo constantemente en tela de juicio la moralidad, la honestidad y los valores de los empleados».