«Me encantó la nostalgia, pero también que sea completamente fresca y nueva (…) Funciona, es lo que me ha gustado, que funciona, es absolutamente fantástica», asegura a Efe Damien, que acudió a la proyección con su disfraz de cazafantasmas al igual que otras dos decenas de fervorosos entusiastas.
Y seis de ellos preguntados tras el final de «Ghostbuster: Afterlife», que se estrenará comercialmente en las salas el 11 de noviembre, coincidieron con Damien.
La película de Sony, que se proyectó la noche del viernes entre un gran secretismo y cuyas críticas estaban embargadas hasta las 15.00 del sábado, horario de Nueva York (19.00 GMT), se estrenó el pasado agosto en el festival CinemaCon de Las Vegas, pero sin que trascendiera ningún detalle.
Antes de su visionado en la edición neoyorquina del salón más pop, ya se intuía que algo se estaba cociendo. Había cazafantasmas esperando en el patio, paseándose por las salas de la exposición, subiendo y bajando escaleras y reuniéndose con todos sus equipos para cazar su último trofeo, la película.
Una emocionada Asia Rose, disfrazada de «Stay Puft Marshmallow Man», el gigante blanco hecho de dulce de nube que aparece en la primera película, confiesa que tiene «una conexión especial con «Ghostbusters» (Cazafantasmas), y explica: «A mi hermano y a mi nos encantaba».
«Pero él murió, así que ha sido realmente increíble poder ver una película como esta en un lugar como este, con una audiencia como está y teniendo las mismas reacciones que hubiera tenido si la hubiera visto con él, porque me ha encantado cada minuto de la cinta», agregó.
UN FERVOR SIN RESQUICIOS
El entusiasmo y la pasión de los presentes en una sala casi repleta con capacidad para tres mil personas fue completo durante toda la proyección y se notaba con cada guiño, con cada recuerdo o con cada actor de las otras sagas que aparecían en la pantalla.
«Yo sentí esa emoción, estar en una sala con tanta gente que siente la película igual que tú», asegura a Efe Rubén Alonso que en su arma de protones lleva impresas las firmas de los actores Ernie Hudson y Dan Aykroyd.
Antes de la proyección, el director de la cinta, junto a Ivan Reitman, padre de Jason, productor de la tercer largometraje y director de las legendarias Ghostbusters (1984) y Ghostbusters II (1986) dialogaron junto a las principales actrices y actores como Mckenna Grace, Finn Wolfhard, Carrie Coon, Logan Kim y Celeste O’Connor, sobre su relación con el título.
«Durante toda mi vida me habían preguntado si yo haría una película de los cazafantasmas y yo hacía una asunción incorrecta y egoísta de que la gente quería ver mi película, cuando la realidad es que todos queremos ver otra película de los cazafantasmas, volver a entrar en (el auto) Ecto-1 y volver a empuñar el arma de protones», aseguró el director.
Y a juicio de los más fanáticos entre sus seguidores, no solamente no ha fallado, sino que han conseguido que la espera de más de un año para verla por retrasos vinculados a la pandemia haya merecido la pena.
REIVINDICACIÓN DE LOS CINES
En su intervención, Reitman también agradeció la apuesta de Sony por los cines y defendió las salas de proyección.
«Sí, queremos hacer una película para que sea disfrutada con una gran audiencia, con palomitas de maíz, en una pantalla grande, con un sonido increíble. Vivirlo como vivimos la película en 1984», dijo antes de asegurar que le gustaría que otros directores se lanzaran a rodar sus propias versiones.
«Quiero ver películas de Los Cazafantasmas de todos mis directores favoritos, y esperamos que esta película les prepare la mesa», agregó antes de que el público rompiera en un gran aplauso.
Disfrazado del Guardián de la Llave, otro de los personajes míticos de saga, Omar también alaba la nueva entrega y dice que está deseando llevar a sus hijos a verla.
«La película es excelente, por esta dedicación a los antiguos actores, a como era en los años 80. Es simplemente un trabajo fenomenal de Jason Reitman y espero ya la próxima película, si hay otra», declara.
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