AFGANISTÁN.– Los talibanes dispersaron violentamente este jueves una protesta en Kabul en la que participaron decenas de mujeres, durante la que defendieron los derechos de las afganas y criticaron la situación económica del país, afirmó a Efe una de las organizadoras.
«Nuestro objetivo es alzar la voz de una nación pobre, que se ha visto sumergida en una crisis económica y en la pobreza, y los talibanes no están prestando atención a eta situación. Los niños y las mujeres son los más afectados por los problemas actuales», dijo a Efe la activista Deeba Farahmand, una de las convocantes.
Los talibanes impidieron a decenas de mujeres acudir al lugar de la protesta celebrada en el centro de Kabul, con la intención de marchar hasta el palacio presidencial, y limitaron el número de manifestantes a solo 56, dijo.
Farahmand explicó que los fundamentalistas, que tomaron el control de la capital el pasado 15 de agosto, redujeron luego el número a apenas una treintena y finalmente dispersaron la protesta.
«Golpearon a manifestantes y periodistas que estaban cubriendo (el acto), los talibanes han conseguido prevenir nuestra protesta dispersándola y limitando su número, pero vamos a continuar en el futuro», dijo.
«Trabajo, pan, educación» o «las escuelas de niñas deben ser reabiertas» fueron algunos de los eslóganes coreados durante la breve protesta.
Farahmand afirmó que la manifestación estuvo dirigida a captar la atención del resto del mundo, ya que no cree que los talibanes estén dispuestos a escuchar a las mujeres.
«Pedimos a los países de la región y al comunidad internacional que no reconozcan oficialmente al Gobierno talibán hasta que respeten los derechos de los afganos, especialmente de las mujeres», exhortó la activista.
Desde que ganaron el control del país, al término de una fulgurante ofensiva durante la retirada final de las tropas internacionales, los fundamentalistas han impedido la reapertura de las escuelas de educación secundaria para niñas y cerrado las oficinas gubernamentales para las empleadas.
Por otra parte, la economía afgana se encuentra en una situación crítica y Naciones Unidas ha advertido que el país se encuentra al borde de una emergencia humanitaria, con unos 18 millones de personas necesitadas de ayuda.
«El país está sumido en una difícil crisis económica, los precios de los productos de uso diario son altos, (y) la gente ha perdido su trabajo o aquellos que lo conservan no son pagados», lamentó el analista económico Abdullah Omari.
Recibe las últimas noticias en tu casilla de email