Redacción Internacional.– La variante de preocupación Ómicron, detectada por primera vez en Sudáfrica el 24 de noviembre, multiplicó los contagios de coronavirus a nivel mundial.
La nueva mutación ya está presente en 110 países, más de 8.000 de vuelos fueron cancelados durante la Navidad y los nuevos casos crecieron de manera exponencial a escala global y alcanzaron cifras récord desde el inicio de la pandemia en España, Italia, Irlanda, Francia y Reino Unido.
Frente a la alta velocidad de transmisión de la nueva variante, los científicos establecen un comparación con una de las enfermedades infecciosas más contagiosas que existen: el sarampión. Es evidente que no producen los mismos síntomas ni afectan a personas del mismo grupo etario, pero la propagación ultrarrápida es un fuerte punto en común entre las dos afecciones.
El prestigioso inmunólogo español Alfredo Corell afirmó que la variante Ómicron del SARS-CoV-2 es tan contagiosa como el sarampión, en una reciente entrevista con la revista The Conversation.
El especialista español señaló que “como ha ocurrido con otras variantes anteriores, cuando se detecta una nueva variante es porque ya está circulando entre la población.
Por esta razón, todas las precauciones de los gobiernos que cierran fronteras han sido inútiles. Ahora, en todos los países europeos, incluida España, la Ómicron prevalece sobre las variantes anteriores, incluida la Delta”.
El analista médico estadounidense Jonathan Reiner coincidió con el experto español: “Olvídense de las olas de coronavirus, se avecina un tsunami. La variante Ómicron es extraordinariamente contagiosa. Es tan contagiosa como el sarampión, y ese es el virus más contagioso que hemos visto”, dijo el especialista en declaraciones a CNN.
El experto de EEUU advirtió que la nueva mutación detectada en Sudáfrica “es extraordinariamente contagiosa” y alertó que en las próximas semanas se convertirá en la variante dominante en Estados Unidos.
“Necesitamos proteger nuestro sistema de atención médica, y es por eso que todos los estadounidenses deben usar mascarillas y vacunarse en este momento porque nuestra infraestructura de atención médica está en juego en este momento”, aseguró Reiner.
“Estamos atónitos con la velocidad de Ómicron, nunca hemos visto algo así. Es superior al sarampión, es increíble la velocidad que tiene, nos ha dejado pasmados a todos”, señaló el epidemiólogo e infectólogo argentino Hugo Pizzi.
“Esto ha sido un aprendizaje permanente y tenemos que ver cómo nos defendemos y como lo atacamos, la velocidad de Ómicron nos ha dejado perplejos”, agregó el experto en declaraciones a radio Brisas.
Los casos de Ómicron confirmados se duplican cada 36 y 72 horas en los países en los que ya está presente, según el último informe de la OMS, que indica que la nueva mutación tiene una “ventaja de crecimiento sustancial” sobre la variante Delta, hasta ahora dominante.
Esta suba abrupta de la infectividad, en comparación con el virus ancestral de SARS-CoV-2, detectado en diciembre de 2019 en Wuhan, tan alta como el sarampión, es lo que hace a Ómicron más preocupante que las otras variantes.
El inmunólogo español explicó cómo es el proceso de infección de los virus: “Para determinar la capacidad de dispersión de un organismo patógeno se aplica un índice conocido como número básico o tasa básica de reproducción (R).
Este índice el número medio de casos nuevos que genera un caso positivo durante un período de infección”. Por ejemplo, si un patógeno tiene un R de 2, significa que una persona infectada infectará a otras dos en promedio. Y eso ya provoca que el número de infectados aumente exponencialmente.
El índice R es inherente a los virus, pero puede variar según las condiciones y depende directamente del número de contactos. Así, si el R se acerca a un valor por debajo de 1, el virus desaparece con el tiempo. Por el contrario, si es mayor, el contagio aumenta.
Entre los virus más contagiosos encontramos el del sarampión, que se transmite por vía aérea y cuyo R se encuentra entre 12 y 18. Otras enfermedades infecciosas de alta propagación: la tos ferina, con un R de 12 a 17; difteria, 6 a 7; viruela, polio y rubéola, con un R de 5 a 7.
Con el avance de la ciencia, todas estas enfermedades han sido controlados gracias a la cobertura de vacunación. Para todos ellos, salvo la viruela que ha sido erradicada, hay inoculantes contemplados en los calendarios oficiales y obligatorios de vacunación que se inyectan en los primeros años de vida, destacó el especialista español.
Es decir, a pesar de su alta capacidad de contagio, estos patógenos ya no nos causan enfermedades, salvo brotes que se han producido sobre todo en grupos no vacunados, pues están siendo inmunizados desde la infancia.
Un estudio publicado recientemente indica que el R de la variante inicial del coronavirus que comenzó a extenderse por el planeta a fines de 2019, fue de 2,5.
En el caso de la variante Delta, que se impuso rápidamente en todo el mundo, se estimó un R cercano a 7 y, para Ómicron, se calcula un R de 10.
Como en el caso del sarampión, la varicela, la viruela y otras enfermedades altamente infecciosas, la vacunación es una de las principales herramientas para frenar la transmisión del virus. Y en el caso del SARS-CoV-2, que se transmite por aerosoles, las medidas de cuidado y distanciamiento social, no pueden dejarse de lado.
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