REDACCIÓN INTERNACIONAL.- El presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó este martes que «Rusia no puede ni debe ganar» la guerra de Ucrania, y que se van a mantener las sanciones a Moscú y la ayuda a Kiev «tanto como sea necesario».
En su conferencia de prensa tras el final de la cumbre del G7, Macron denunció que Rusia «utiliza las consecuencias del conflicto» como el aumento de los precios de la energía o la amenaza de hambruna en países en desarrollo por el bloqueo de las exportaciones de cereales «para que algunos Estados duden» de su apoyo a Ucrania y su condena a Moscú.
En este sentido, aseguró que «el G7 se ha activado para evitar una nueva crisis además de la guerra», por ejemplo con la iniciativa estadounidense para fijar un techo al precio del petróleo ruso, y más en general una concertación de los países compradores con los productores para controlar ese precio.
Insistió en que, en contra de lo que pretenden algunos, no es Occidente el que se opone al resto del mundo, «sino el campo de la paz contra el de la guerra. Rusia no puede ni debe ganar. Nuestro apoyo a Ucrania y nuestras sanciones a Rusia se mantendrán tanto como sea necesario y con la intensidad necesaria en las próximas semanas y en los próximos meses».
Avisó de que la guerra «está lejos de terminar» pero aun así hay que empezar a trabajar por una parte en la reconstrucción de Ucrania, y por otra para evitar que el conflicto provoque una nueva crisis por los efectos que está generando en el terreno de la energía o del aprovisionamiento en alimentos.
Preguntado sobre el mensaje al G7 del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en el que pedía ayuda para poder poner fin a la guerra para finales de año, Macron puntualizó que nadie cree que el conflicto pueda terminar «en las próximas semanas o en los próximos meses».
Y aunque a continuación manifestó su esperanza de que haya una salida para finales de año, puntualizó que eso tiene que ser «con la certitud y con la voluntad de que Rusia no debe ni puede ganar».
El presidente francés afirmó que Vladímir Putin ha salido con la invasión de Ucrania de la ambigüedad que mantenía antes sobre sus verdaderas intenciones y su aparente disposición a discutir.
«La agresión lanzada sobre el territorio ucraniano -señaló- tiene un objetivo: la rendición de Ucrania. Eso no es una negociación. Por eso vamos a seguir sancionando a Rusia y ayudando a Ucrania para que consiga una victoria completa o que pueda negociar en los términos y en el momento en que lo decida, con sus condiciones».
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