Redacción.- La Iglesia Católica, da inicio a la celebración de la Semana Santa, conmemorando el Domingo de Ramos, la cual concluye con el Domingo de Resurrección. Esta fiesta cristiana es movible debido a que cae el domingo antes de Pascua, es decir, el sexto domingo de Cuaresma.
Los fieles acostumbran colocar las palmas, ya bendecidas, junto a las cruces, en altares o cuadros religiosos que hay en sus hogares como recuerdo de la victoria pascual de Jesús.
Durante este día se recuerda la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, ciudad Santa que expresa la manifestación como Rey y como Mesías. Este evento es mencionado en cada uno de los cuatro evangelios canónicos.
Según los textos bíblicos, es este día Jesús fue recibido por varios seguidores, quienes agitaban palmas y ramos de olivo, los que también le colocaban como alfombra mientras pasaba montando un asno (antigua montura de los príncipes). La multitud que lo seguía gritaba: “¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!”