Esta mañana me he levantado con los sueños de Cortez y las canciones de Serrat. “Hasta cuándo seguiremos esperando, hasta cuándo seguiremos dando cuerda; ya el reloj de la esperanza está fallando y podemos irnos todos a la….(allí…allí).”.
¿Cuándo vamos a empezar a educar para la prevención? Las infecciones de transmisión sexual (ITS), dentro de ellas el Vih/sida, los embarazos no deseados y abortos inseguros pueden evitarse si educamos a la población y le ofrecemos preservativos y anticonceptivos económicos.
Un ejemplo deseable es el modelo de Brasil. En este país amigo se ejecuta una campaña masiva de utilización del condón, dicho programa ha logrado estabilizar la tasa de infección del VIH y disminuir el número de muertes por sida. Hace unos años, el Ministerio de Salud de Brasil empezó la campaña de sexo seguro con la distribución gratuita de preservativos, con motivo del carnaval. El Gobierno distribuyó en el mes de febrero 10 millones de condones, además de los 15 millones enviados en enero a los estados en preparación para el carnaval.
“Con condones, la alegría sigue después de la fiesta”, fue el eslogan oficial difundido por la radio y la televisión en Brasil, cuyo Ministro de Salud declaró que dicha consigna “no es sólo un mensaje de carnaval, es para que la gente esté consciente de que con prevención pueden seguir divirtiéndose después del carnaval”. Además, el Gobierno instaló máquinas dispensadoras de preservativos en las escuelas públicas.
Al otro lado del Atlántico, en las Islas Canarias, las autoridades también tienen claro que durante los días de bailes y de fiesta propios de los carnavales no se puede descuidar la prevención. Por eso lanzaron una campaña que incluyó la distribución gratuita de 150,000 condones. La campaña tuvo por objetivo evitar que la diversión del carnaval hiciera olvidar la importancia del uso del preservativo como medio eficaz para prevenir las ITS y los embarazos no deseados. Su lema fue “Ándate con ojo con Don Carnal”, eslogan utilizado en carteles y anuncios emitidos por televisión en horarios específicos para el público joven. La campaña contempló también la colocación de 5,000 carteles en lugares de interés público y sanitario, en centros de enseñanza y en las zonas más concurridas de los carnavales.
En República Dominicana el calor, la música, las hormonas, la playa, los ríos, incluso la crisis económica aumenta la actividad sexual, no tenemos que esperar el carnaval. Nuestras jóvenes se están infectando y embarazando por falta de voluntad política. Con educación sexual, anticonceptivos y condones, reduce la pobreza.
Hoy puede ser un gran día.
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