SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Conseguir justicia luego de ser estafados con la compra de un vehículo es una lucha que ha dejado más sinsabores que victorias a quienes han tenido que enfrentar a sus estafadores en los tribunales.
Años de espera, decenas de audiencias y hasta la descarga de los acusados son parte de la odisea que aseguran vivir quienes deciden pelear por sus derechos.
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El camino de la justicia, obstaculizado. Hasta personas que han admitido ser miembros de la banda de malhechores, dejados en libertad.
La Dirección General de Impuestos Internos (DGII) asegura que constantemente se mantiene vigilante de este tipo de irregularidades, por lo que empleados han sido cancelados luego de comprobarse que han cometido actos reñidos con la ley.
En el caso de Lara, este aún espera que se asigne un tribunal para el nuevo juicio en contra de quienes estafaron a su hermano.