ANGEL RONDÓN -testaferro del cártel peledeísta que detenta el poder estatal dominicano con modalidad de dictadura institucional, corrupta y corruptora- ha sido seleccionado como mampara que reciba temporalmente los golpes del escándalo internacional de los sobornos de ODEBRECH que se extienden a los gobiernos de Hipólito, Leonel y Danilo en sentido ascendente, con responsabilidad de los tres.
El “próspero empresario”, armador de procesos mafiosos afines a la cúpula del PLD, ha sido escogido por la “familia morada” como la “mona” (en el lenguaje gallístico) o el “chivo expiatorio” del teatro a instalar en vista de que el país tiende a levantarse contra la impunidad de la corruptela. En ese teatro se están montando dos obras, dos comedias:
* Una dirigida por el PROCURADOR JEAN ALAIN RODRÍGUEZ, que es precisamente la comedia de la “mona” de Rondón, que curiosamente fue alabada en el programa de tv ENFOQUE MATINAL por Pancho Castellano, dirigente de Participación Ciudadana, amigo de la USAID y abogado del Grupo BONETTI, especializado en la impunidad de la estafa de ANTENA LATINA. Y quien además dice luchar contra la impunidad.
* La otra comedia la dirige el propio Presidente Medina en alianza (para esos fines) con los ex presidentes Leonel Fernández e Hipólito Mejía, ambos embarrados en lo de ODEBRECH, e Hipólito conjugando desde hace días el verbo DANILIAR. Con la destacada participación de una COMISIÓN DE NOTABLES (que para variar coordina el inefable Monseñor Agripino Nuñez Collado), integrada por una parte de la cúpula empresarial y por destacados de intelectuales y comunicadores orgánicos, beneficiarios y muy funcionales a la altamente rentable dictadura morada copada por el cartel del mismo color.
Comedia montada por decreto por el principal responsable y beneficiario de la conexión mafiosa dominicana con ODEBRECH y la cúpula del PT de Brasil para auto-descargarse, notablemente y publicitariamente, de la estafa mayor fraguada con ese consorcio: la sobrevaluación de las Plantas a Carbón de Punta Catalina, que habrán de
terminar en manos de los jefes del CONSEJO NACIONAL DE LA EMPRESA PRIVADA (CONEP).
Los grandes capos tienen por norma que sus valiosos favores se pagan, y esta vez con testimonios que hablen de la honestidad del autor del decreto que constituyó la comisión que forma el elenco de tan importante comedia.
Todo esto nos remite a estas verdades difíciles de rebatir: la impunidad no es causa, la preceden delitos que tienen nombres y apellidos que ejercen poder, la protege un blindaje que opera desde instituciones encadenadas por un centro dictatorial dirigido desde las dos principales figuras del Comité Político del Cártel Morado y desde el Despacho Presidencial hegemónico. Ministerio publico y poder judicial está bajo esa tutela. La red empresarial propia y los grandes empresarios tradicionales asociados en esas suciedades (incluidos sus bufetes jurídicos) responden a esa maquinaria de delitos estatales y privados (combinados entre sí) y a la construcción de la impunidad que permite garantizar el blindaje institucional.
EN CONSECUENCIA, no es seria, no es verdadera, no es confiable la lucha CONTRA LA IMPUNIDAD que no tienda a confrontar los delitos de Estado y empresariales de todo tipo, a sus principales protagonistas y beneficiarios, a los mecanismos que conforman el blindaje y les garantizan impunidad a través de variadas maniobras y subterfugios.
Hay que estar claro en que las instituciones de un Estado delincuente, controladas por una partidocracia delincuente y al servicio de una cúpula empresarial delincuente, no se han sido conformadas para impartir justicia. A ellas y a sus “incumbentes” se les debe emplazar y acorralar hasta llegar a su impugnación en vista de que su misión es garantizar su impunidad y las de sus jefes supremos.
Pasa esto en el sistema de justicia, en todas las Cortes, en el Congreso, en la Cámara de Cuentas, en el Poder Electoral; pasa en materia de delitos de Estado y empresariales, ambientales, mineros, políticos, narco-delitos comunes… porque todo -o casi todo- está controlado centralizadamente por la clase gobernante-dominante mafiosa que detenta todos los poderes, menos el que el pueblo puede crear desde la democracia de calle camino a una Constituyente Popular y Soberana que cambie todo, que cree una nueva institucionalidad y decida el modelo de sociedad y Estado que las mayorías decidan.
Estas nuevas maniobras, estas nuevas comedias, no deben detener la voluntad colectiva auto-convocada en toda su diversidad para comenzar a tomar las calles el domingo 22 de enero del 2017 contra la corrupción y los corruptos, contra impunidad y contra el blindaje dictatorial que la sostiene. Para reclamar cárcel para los grandes delincuentes de Estado, recuperar lo robado, sancionar ejemplarmente todo tipo de crímenes y crear las nuevas instituciones que aseguren el fin de este poder delincuente. (11-01-17, Santo Domingo, RD)
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