Periodista sobrevive a disparo en la cabeza en Guatemala

Los hechos tuvieron lugar la tarde del miércoles, cuando dos personas atacaron al director del noticiero Notizabal y Multiviral Canal 19, en Puerto Barrios, mientras estaba en una abarrotería propiedad de su familia.

Rodríguez fue trasladado por los Bomberos Voluntarios a un hospital local donde permanece internado y según el último informe médico está estable a pesar de que aún tiene la bala en el cráneo, pero en los próximos días los médicos esperan poder retirarle el proyectil.

El periodista, agrega el comunicado, contará con seguridad permanente de la Policía Nacional Civil (PNC) después de este ataque.

Según el Observatorio de los Periodistas del Centro de Reportes Informativos de Guatemala (Cerigua), en marzo de 2016 Rodríguez denunció ante la Fiscalía y la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) haber sido amenazado por parte de un empleado de la Municipalidad de Puerto Barrios, quien le advirtió que «tuviera cuidado».

El periodista declaró al observatorio en esa oportunidad que el problema había empezado cuando abordó al alcalde Hugo Sarceño Orellana por el supuesto interés del ayuntamiento en concesionar la empresa eléctrica municipal.

Desde esa ocasión «a Rodríguez se le negó el acceso a las actividades de la comuna, incluidas las reuniones de los Consejos Comunitarios de Desarrollo (Cocodes). Sin embargo, esta situación empeoró cuando por medio de redes sociales miembros del concejo municipal y empleados de relaciones públicas empezaron a lanzar ataques contra el periodista».

El Observatorio de los Periodistas manifestó también su preocupación por las amenazas de muerte que recibieron dos periodistas en Escuintla la semana pasada por parte de pandilleros.

El hecho ocurrió en la sede del Organismo Judicial en Santa Lucía Cotzumalguapa el jueves 8, cuando los reporteros se encontraban cubriendo la audiencia de primera declaración de 32 pandilleros sindicados de numerosos crímenes.

Dos de ellos, continúa, «se acercaron a dos periodistas y les advirtieron que dejarán de tomar imágenes porque avisarían a «mareros» en la calles para que los buscaran y asesinaran. Uno de los comunicadores se abstuvo de publicar la noticia, por su seguridad y la de su compañero».