Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.
Con mucho disgusto veo como se celebra más la venida de Santa Claus, que el nacimiento de Cristo Jesús.
Día a día se va perdiendo la fe en el salvador del mundo que nos nace en un pesebre mal oliente, y vemos como nuestros arbolitos de navidad se cubren con regalos y el Niño Jesús que es la venida que esperamos esta tan cubierto de regalos que apenas se ve el Niño Jesús.
Quiero ponerles una comparación que llego a mis manos hace algún tiempo para que la mediten, y se comprometan con sus hijos a celebrar el día de Reyes, y no la venida del gordo Santa Claus.
Jesús se pasea por el viento y camina sobre el agua, Santa Claus viene una vez al año. Santa Claus llena tus calcetines con regalitos, Jesús suple tus necesidades. Santa Claus baja por tu chimenea sin invitación, Jesús se detiene en tu puerta y toca, después entra en tu corazón cuando tú lo invitas. Para ver a Santa Claus tiene que hacer largas colas, Jesús esta tan cerca como el hecho de mencionar su nombre. Santa Claus te deja sentarte en sus piernas, Jesús te deja descasar en sus brazos. Santa Claus no sabe tu nombre, todo lo que te puede decir es: Hola pequeño, ¿Cómo te llamas?, Jesús sabe tu nombre desde antes que nacieras, no solo sabe tu nombre, también sabe tu dirección, Él sabe tu historia y tu futuro. Santa Claus tiene una barriga que parece que está llena de mermelada, Jesús tiene un corazón lleno de amor. Todo la que Santa Claus puede ofrecerte es un HO, HO. HO, Jesús te ofrece salud, ayuda y esperanza. Santa Claus te dice no llores. Jesús te dice: Descansen vuestras preocupaciones en mí, que yo cuidare de vosotros. Los ayudantes de Santa Claus hacen juguetes, Jesús hace una nueva vida, repara los corazones lastimados y arregla los hogares rotos. Santa Claus te puedo hacer reír, Jesús te da la alegría, que es tu fuerza. Santa Claus deja regalos bajo tu árbol, Jesús fue nuestro regalo y murió en un árbol.
Por eso debemos creer en Jesús y no en el gordo Santa Claus. Cree en los Reyes Magos que fueron los que le llevaron al Niño Jesús recién nacido los regalos de oro, incienso y mirra.
En el Evangelio de San Mateo, Capitulo 2, Versículo del 1 al 12, nos habla del Nacimiento de Jesús, y de los Magos de Oriente. Léanlo y medítenlo.
Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.
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