REDACCIÓN INTERNACIONAL.-Los pandilleros de la banda Trinitarios acusados de matar a Lesandro “Junior” Guzmán-Feliz están siguiendo estrategias en la cárcel y la corte que podrían complicar sus casos y resultarles en nuevas demandas.
De entrada, dos sospechosos “declararon la guerra” a los oficiales de corrección en Rikers Island esta semana con agresiones y amenazas.
Uno de ellos lanzó orina acumulada en un vaso a uno de los guardias, mientras otro amenazó de muerte a un vigilante, reveló el New York Post.
Danel Fernández, de 21 años, llenó una taza con su propia orina y la tiró en la cara de un oficial de corrección de sexo femenino en el Centro Vierno R. George en Rikers Island el miércoles por la tarde.
El otro incidente ocurrió el martes, cuando José Muniz, de 21 años, amenazó con matar a otro oficial de corrección.
La fuente de corrección dijo que los pandilleros no pueden ser transferidos a confinamiento solitario, porque ambos tienen 21 años.
El ABC News reportó que un miembro de una pandilla le cortó la cara a un oficial de corrección de Rikers Island, pero no se confirmó si era de “Trinitarios”.
En tanto, en interrogaciones, los sujetos acusados de matar a machetazos a “Junior” el 20 de junio han decidido protegerse mutuamente.
El presunto cabecilla de la pandilla “Trinitarios”, Diego Suero, de 29 años, y los presuntos secuaces Gabriel Ramírez Concepción, de 26 años, y Danilo Payamps-Pacheco, de 21, comparecieron en la corte del Bronx, donde dijeron que no ofrecerían pruebas contra sus compañeros pandilleros.
