SANTO DOMINGO, República Dominicana.- A más de medio siglo de existencia y solo un año de haberse convertido en materno infantil, en el hospital José Francisco Peña Gómez en la provincia Valverde, han muerto 30 bebés, algunos al nacer y otros tras varios días de ingresados en la improvisada área de cuidados intensivos de neonatos. Entre agosto y septiembre, van siete.
Mientras que el director del centro resalta la falta de apego al protocolo médico, los galenos revelan carencias a las que dicen se ven impuestos a trabajar.
Pero los relatos de los madres dan un giro a la balanza. ¿Negligencia médica o falta de recursos?