Economía y educación

De relieve la detallada exposición del Gobernador Héctor Valdez Albizu durante la Gala al Inversionista Extranjero organizada por el Centro de Exportación e Inversión de la República Dominicana, por sus siglas el CEI,  en la cual destacó que durante los últimos diez años el país ha recibido más de 27 mil millones de dólares de Inversión Extranjera Directa.  Salvo Panamá, que es un centro financiero internacional, dicha suma supera lo recibido por todas las demás economías de Centroamérica.

Con respecto al presente año, pese a haberse registrado una sensible baja en los ingresos provenientes del turismo estimada en unos 400 millones de dólares, debido a la falaz campaña que afectó al sector durante los primeros meses, a las tensiones geopolíticas en distintos lugares del mundo y la disputada pugna comercial entre los Estados Unidos y China, el timonel del Banco Central aseguró que todo apunta a que el crecimiento de la economía al cierre del 2019 se acercará a la meta inicial estimada del de 5 por ciento.

La  cifra contrasta con los pronósticos para América Latina y el Caribe de apenas un 0.2 por ciento, y resulta superior al promedio mundial  esperado de un 3 por ciento. Adicionalmente la inflación oscilaría entre apenas el 3.5 y 4 por ciento, mientras la inversión extranjera directa rebasará  los 2 mil 600 millones de dólares y las perspectivas de crecimiento para el  2020, a juicio del Gobernador Valdez Albizu son similares a las del presente, pese a que será  un  año electoral y de intensa actividad política durante el primer semestre.

Por otra parte, las ventas del comercio durante el Viernes Negro sobrepasaron los seis mil millones de pesos y casi triplicaron el rango de incremento previsto por los comerciantes de un 8 por ciento en relación al año anterior. Son asimismo una señal de que las medidas adoptadas por el Banco ingresando al circulantes decenas de miles de millones de pesos con la liberación del amplio excedente del encaje legal de la banca comercial.  Dirigidas sobre todo a impulsar los sectores productivos y el consumo,  inyectó un gran dinamismo al movimiento económico y amplió de manera significativa la oferta de crédito.

Otro dato de importancia ha estado representado por el aumento en las recaudaciones de la DGII, cuyo director general Magín Díaz, reporta un crecimiento en las recaudaciones del 11.5 por ciento, con una meta similar para el próximo año, cumpliendo su estimado propuesto para el presente en más de un 99 por ciento.  Al mismo tiempo, anuncia la implementación de una nueva tecnología de control que permitirá combatir el contrabando de cigarrillos y alcohol, que a más de representar una competencia desleal para el comercio formal que opera dentro de las normas legales y  cumple con sus obligaciones fiscales, representa una pérdida multimillonaria para el Estado en impuestos dejados de percibir.

Por otra parte, si bien persiste la anchura de la brecha de inequidad en la distribución de los ingresos y el nivel de vida de gran parte de la población, un hecho innegable es que se han reducido los niveles de pobreza, y sobre todo de pobreza crítica, gracias en gran medida a los planes sociales del Estado y al valioso aporte de la ayuda familiar que representan  las remesas del exterior.  Todavía es necesario lograr mayores y más acelerados avances en este sentido.

Lástima que no podamos presentar, en cambio, un cuadro más positivo y promisorio en el campo de la educación, después que la última evaluación de PISA nos vuelve a dar las más ominosas señales de su penoso estado de atraso donde a pesar de la cuantiosa inversión de recursos de los últimos siete años que suman la cifra sin precedentes de un billón de pesos pareciera que seguimos encallados en el puesto de arrancada.

Ojalá que ante este recordatorio de nuestros pobrísimos niveles de docencia, en vez de cómo habitualmente tener que asistir al tradicional e improductivo intercambio de inculpaciones entre la ADP y el Ministerio de Educación, se adopte la actitud positiva de admitir las fallas de cada quien, y asumir el firme compromiso de colaborar en poner el mayor empeño en aplicar los correctivos necesarios.

La voz responsable, insistente y orientadora de EDUCA advirtiendo la necesidad de cambiar el modelo educativo debiera convertirse en la meta a lograr.