SAN JUAN DE LA MAGUANA, República Dominicana.- Gran desesperación y angustia padecieron familiares de un menor al tragarse un clavo, luego de ser vacunado en su residencia.
El clavo permaneció tres días en el estómago de Meiver Jiménez, hasta ser extraído.
El menor estaba jugando con una cortina, acostado boca arriba, luego de ser inyectado con la vacuna para niños de su edad.