SANTO DOMINGO. A pesar de que Al Horford trajo el trofeo Larry O’Brien como campeón de la NBA y vino a celebrar con el en la República Dominicana y que le acompañan su esposa Amelia Vega, su madre Arelis Reynoso y el coach de los Celtics Joe Mazzulla, nunca escapa la necesidad de que se le pregunte sobre si volverá a jugar con la selección dominicana y le puso la tapa al pomo: «Ya mi tiempo ha pasado».
Horford siempre soñó con volver como campeón a su tierra natal. Este martes lo hizo orgulloso, pero nunca se queda la pregunta.
Horford, uno de los jugadores más destacados de la NBA, anunció durante una rueda de prensa improvisada en el Aeropuerto Las Américas, en su país natal, que su tiempo como jugador de la selección dominicana ha terminado. “Ya mi tiempo ha pasado”, afirmó el veterano de 38 años, quien jugó por última vez con el equipo nacional hace más de una década.
Horford explicó que está en una fase diferente de su carrera y de su vida, y aunque no planea retirarse del baloncesto, considera que su rol con la selección ha concluido.
En la conferencia, Horford destacó su orgullo por haber traído el trofeo Larry O’Brien, tras una carrera de 18 años en la NBA, para compartirlo con su tierra natal. “Este es un momento muy especial, no solo para mí, sino para mi familia y el país”, expresó. Además, reveló que estará colaborando en una clínica de baloncesto en La Romana junto a su entrenador Joe Mazzulla, reafirmando su compromiso con el desarrollo del deporte en su país.
Al ser preguntado sobre la nueva generación de jugadores dominicanos en la NBA, como Karl-Anthony Towns, Chris Duarte y David Jones, Horford expresó orgullo y admiración, reconociendo el talento emergente del país. Asimismo, subrayó que, a pesar de las críticas, sigue feliz representando a la República Dominicana, aunque de una manera diferente.
Sobre su futuro en la NBA, Horford señaló que mientras se sienta en buena forma y cuente con la bendición de la salud, continuará jugando, reafirmando su intención de seguir contribuyendo al equipo y manteniéndose competitivo.