Johannesburgo. – Al menos doce personas han muerto y miles se han visto afectadas por las lluvias torrenciales que han golpeado los últimos días el este y el sureste de Sudáfrica, confirmaron este martes las autoridades.
Entre los fallecidos, se registraron al menos cinco en la provincia de KwaZulu-Natal (este) y siete en el vecino Cabo Oriental (sureste), junto a graves daños en infraestructuras esenciales.
«Hasta ahora, lamentablemente, cinco personas han perdido la vida en la municipalidad de eThekwini (que incluye la ciudad de Durban y su área metropolitana), que ha sido la más afectada, y docenas de personas están siendo tratadas por lesiones», señaló en un comunicado recogido este martes por medios locales el Gobierno de KwaZulu-Natal.
Así, en los alrededores de eThekwini, las fuertes precipitaciones dejaron numerosas viviendas inundadas y con los techos hundidos, además de derribar árboles sobre líneas eléctricas, lo que provocó apagones en la zona.
«Los equipos de desastre están evaluando actualmente el alcance de los daños, mientras proporcionan ayuda, incluido alojamiento en edificios gubernamentales para los residentes desplazados», añadieron las autoridades.
En otro comunicado, el Gobierno nacional sudafricano detalló que «hasta el lunes por la mañana, al menos siete personas habían perdido la vida en las inundaciones» en el Cabo Oriental, mientras la Cruz Roja cifró en 6,000 a los afectados, incluyendo 2,500 desplazados.
Según esta organización, las inundaciones se vieron agravadas después de que los muros de algunas presas no pudieran contener las grandes cantidades de agua.
En el Cabo Oriental, donde las municipalidades de Nelson Mandela Bay y Buffalo City fueron las más afectadas, unas setenta personas han sido rescatadas en 55 operaciones desde el domingo pasado, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salvamento Marítimo (NSRI, en inglés).
«Hemos comenzado las evacuaciones y estamos situando a personas en diferentes lugares de la municipalidad, como ayuntamientos o colegios, pero algunas familias se niegan a reubicarse porque están preocupadas por sus pertenencias», declaró a medios locales el portavoz de las autoridades de Nelson Mandela Bay, Sithembiso Soyaya.
Abundantes precipitaciones y fuertes vientos golpearon diferentes puntos de Sudáfrica desde este fin de semana, cuando el Servicio Meteorológico del país emitió una advertencia para algunas zonas de las dos provincias citadas, así como las del Cabo Occidental y del Cabo Septentrional.
El presidente del país, Cyril Ramaphosa, ofreció su «pésame» a los familiares de las víctimas e instó a la población a seguir las alertas meteorológicas durante la temporada del invierno austral (junio-septiembre).
En un comunicado, el mandatario animó a los sudafricanos a «tender la mano a miembros vulnerables de sus familias y comunidades, para que esta temporada sea lo más cómoda y segura posible para las personas que tienen recursos limitados o viven solas».