Beirut. – Al menos una persona murió y otras siete resultaron heridas este viernes en un bombardeo israelí contra una vivienda en la localidad de Ahmadiya, en el sur del Líbano, el último en una serie de ataques selectivos atribuidos al Estado judío en esa región.
El Centro de Operaciones de Emergencia en el Ministerio de Salud Pública del Líbano confirmó en un comunicado el fallecimiento de una persona a causa del ataque, y explicó que entre los siete heridos hay cuatro menores que fueron atendidos en una sala de emergencias, sin requerir ingreso hospitalario.
El bombardeo fue perpetrado por un avión no tripulado y tuvo como objetivo una vivienda en Ahmadiya, en el distrito de la Bekaa Occidental, según indicó el canal de televisión libanés Al Manar, perteneciente al grupo chií Hizbulá.
Por el momento se desconoce quién era el objetivo del ataque ni su posible afiliación a algún grupo armado.
La mayoría de los ataque selectivos israelíes en el Líbano tienen como objetivo principal a combatientes de Hizbulá, aunque a veces también están dirigidos contra miembros destacados de las facciones palestinas o de formaciones locales de menor calado como la suní Jamaa al Islamiya.
En lo que va de viernes, el movimiento chií ha reivindicado, por su parte, un total de siete acciones contra el norte de Israel.
Entre ellas destaca una operación con «un escuadrón de drones de ataque» contra la base militar de Filon, que sirve de cuartel general a la División 210 del Ejército israelí y se ubica «al sureste de la ciudad ocupada de Safed», alejada de la frontera con el Líbano.
Según un comunicado de la formación libanesa, se trató de una respuesta a un bombardeo israelí que anoche mató a tres personas a las afueras de la ciudad de Nabatieh, en el sur del Líbano, donde fueron alcanzadas dos motocicletas.
El Ministerio de Salud Pública libanés confirmó entonces que entre los fallecidos había un niño, mientras que Hizbulá anunció posteriormente dos bajas en sus filas.
Las partes están enzarzadas en un intenso fuego cruzado desde hace más de once meses, choques que se desarrollan en el marco de la guerra de Gaza y que suponen su peor estallido de violencia desde el conflicto abierto que libraron en 2006.