Niamey.- Al menos una veintena de personas, incluidos niños, fueron asesinadas a sangre fría en una aldea de la región nigerina de Tillabéri, cercana a la frontera con Mali, por presuntos terroristas que pretendían robar el ganado.
El ataque tuvo lugar este lunes en la aldea de Diambala, ubicada en la convulsa zona conocida como ‘las tres fronteras’ (Níger, Mali y Burkina Faso), donde actúan grupos yihadistas leales al Estado Islámico y Al Qaeda, informaron a EFE fuentes locales.
Ocurrió sobre las 14:00 hora local, cuando los presuntos terroristas llegaron a la aldea, situada a menos de 30 kilómetros de la ciudad de Tillabéri.
«Las autoridades regionales fueron informadas del ataque y prometieron enviar inmediatamente al Ejército, que no llegó a tiempo para impedir el robo de los animales por parte de los atacantes», según afirmó a EFE A. Zakou, un residente local, contactado telefónicamente.
«Los hombres sanos del pueblo, equipados con armas blancas, decidieron espontáneamente perseguir a los atacantes con la esperanza de recuperar sus animales», continuó Zakou, y la persecución dio lugar, según este vecino, «a enfrentamientos de gran violencia entre los asaltantes y los campesinos, que se vieron obligados a regresar al pueblo, donde quemaron casas y mataron a niños».
Para este habitante de la aldea, esta masacre se debe a «la lentitud de los militares en intervenir, incluso cuando son informados a tiempo de la inminencia de un ataque terrorista contra una localidad determinada».
Ello es porque, según este residente, los terroristas «ya no hacen nada en secreto, generalmente envían emisarios a las aldeas para dar ultimátums para recaudar diezmos o plazos para el desalojo de las aldeas. Los jefes locales llaman entonces a las autoridades para denunciar las amenazas, pero la ayuda siempre llega tarde», lamentó.
A falta de comunicación oficial del Gobierno nigerino sobre los ataques recurrentes de grupos terroristas en esta región desde hace tiempo, la población de Tillabéri tiene la sensación de haber sido abandonada por las autoridades militares en el poder.
No solo la población está expuesta a estos ataques, también los militares de la zona. De hecho, este lunes se produjo otro ataque contra una posición militar en la localidad de Boni (departamento de Torodi, Tillabéri) por parte de un grupo terrorista, que se saldó con la muerte de 7 militares nigerinos y tres heridos, entre ellos un civil, según un comunicado de prensa del Ministerio de Defensa de Níger difundido este martes por la radio gubernamental.
El comunicado atribuye la responsabilidad del ataque al JNIM (grupo terrorista afiliado a Al Qaeda) e informa de la destrucción de 4 vehículos militares tras el mismo. Asimismo, da cuenta de una decena de presuntos terroristas muertos y de la destrucción de varios vehículos atacantes.
En este país de la inestable zona del Sahel, gobernado por una junta militar golpista desde julio de 2023, actúan grupos terroristas leales a Al Qaeda y al Estado Islámico, que llevan a cabo ataques recurrentes contra las fuerzas de seguridad y los civiles.
Según la plataforma ‘Armed Conflict Location And Event Data Project’ (ACLED), que monitoriza la violencia en el mundo, en 2023 murieron 1.107 personas en Níger por ataques de grupos no estatales, frente a 959 en 2022.
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