Ayer, mientras tomaba aire para emprender la rutina criticona del día, recordé cuando el PLD, rutilante novedad cargada de promesas de renuevo del sistema político (entonces bajo la severidad moralista de Bosch; precisamente cuando el país, según Franklin Almeyda, se dividía entre “peledeístas y corruptos”), publicó un muy famoso “Álbum de la Corrupción” contra el PRD y el gobierno de Antonio Guzmán…Pero en eso el colega Américo Celado me interrumpió con una observación breve y sin desperdicio, cargada de fina ironía: “No relajes, Colombo, pues comparado con lo de hoy aquello fue un álbum de postalitas!” (¡Y es cierto!).