“Las imágenes son claras; en ningún momento hubo maltrato. Nosotros somos respetuosos de los derechos humanos”, aseguró Riverón en declaraciones a la prensa.
Dajabón, República Dominicana.– Dajabón, República Dominicana. – El alcalde del municipio fronterizo de Dajabón, Santiago Riverón, respondió este viernes a las críticas que ha generado un reciente operativo en el parque Juan Luis Franco Bidó, donde varios menores haitianos fueron retirados del lugar donde dormían, alegando que no hubo maltrato durante la intervención y que se actuó respetando los derechos humanos.
“Las imágenes son claras; en ningún momento hubo maltrato. Nosotros somos respetuosos de los derechos humanos”, aseguró Riverón en declaraciones a la prensa.
El edil también dirigió un mensaje directo a sus detractores, invitándolos a adoptar a algunos de los menores en situación irregular para comprender de primera mano los desafíos que plantea su presencia continua en espacios públicos.
“A quienes me critican, les digo: llévense dos o tres menores haitianos a sus casas, adóptenlos, y luego hablamos”, dijo el funcionario.
Riverón insistió en que sus acciones no responden a sentimientos de odio o discriminación, sino a la necesidad de “mantener el orden, preservar la cultura y garantizar la organización” en el municipio fronterizo, que ha sido escenario frecuente de situaciones vinculadas a la migración irregular.
“Esto no es un tema de odio. Es un tema de orden, de cultura y de organización”, afirmó.
Las declaraciones del alcalde llegan en medio de un clima de tensión, tras la reacción del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani), que condenó la actuación de las autoridades municipales y confirmó que los menores fueron posteriormente repatriados.
Riverón también expresó su preocupación por el avance de la migración irregular en la frontera con Haití, con afirmaciones que han sido consideradas polémicas en redes sociales:
“No podemos permitir que los haitianos se coman nuestro país como se comieron el de ellos. Solo queda un pedazo de tierra con personas que dicen ser seres humanos”, expresó.
Las declaraciones han generado fuertes reacciones, mientras organizaciones de derechos humanos y autoridades nacionales siguen observando con atención lo que ocurre en la región fronteriza.