SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Atrincherado en el Instituto de Desarrollo y Crédito Cooperativo (Idecoop), desde donde dirige con su tropa de choque una obsesiva campaña para tratar de acallar a la prensa independiente, el señor Pedro Corporán no escarmienta.
Ante el fallo judicial que desestimó su demanda al periodista Marino Zapete por supuesta difamación, ahora amenaza con enfilar sus cañones a mi persona y demandarme en los tribunales.
Con su insistencia en demandas temerarias, este personaje ha adquirido una cuestionada notoriedad, porque más que tratar de proteger lo que él considera su honra personal, lo que persigue en realidad es coartar el libre ejercicio periodístico.
[jwplayer mediaid=»301556″]
Si cree que los medios y los periodistas deben ignorar la forma en que maneja el Idecoop, lo que debe hacer es actuar con rectitud y apego a la ley y no incurrir en las irregularidades que acaba de confirmar la auditoria de la Cámara de Cuentas, recién colgada en su página web.
En lugar de intimidarnos, esta amenaza, si llega a cumplirse, como esperamos, nos dará la oportunidad de defender el derecho que tienen los ciudadanos a conocer cómo los funcionarios usan los fondos públicos, que en gran medida se nutren con impuestos pagados por los contribuyentes.
Nuestras emisiones noticiosas de SIN y El Informe, continuarÁn respondiendo a un periodismo libre e independiente que no claudicará ante un funcionario que usa el Idecoop como un feudo personal en recompensa por el minúsculo aporte electoral de su partido, el PUN, en las pasadas elecciones.
Por una filosofía de servicio y orientación, esos son principios fundamentales que apoyan nuestro trabajo para garantizar el derecho de la gente a recibir y dar informaciones sobre los temas de interés general, sin cortapisas ni restricciones y rechazando, con invariable firmeza, la autocensura y el silencio que quiere imponer este funcionario.
Señor Corporan, aquí las bravuconadas como la suya no logran ponernos a temblar. Por el contrario, nos dan renovadas fuerzas para continuar la incansable lucha contra los enemigos de la libertad y en favor del periodismo que no se deja doblegar en su irrenunciable compromiso con la verdad.