He estado reflexionando sobre la reelección del presidente de la Republica. Solo se permite que gobierne dos periodos consecutivos. ¿Por qué? El artículo 22 dice “son derechos de ciudadanos y ciudadanas elegir y ser elegibles para los cargos”. Así debe ser ¡sin excepción!
Cuando un presidente está terminando sus dos periodos, la oposición comienza a recordar que la Constitución no permite la reelección, pero sus seguidores, buscan mecanismos para modificarla. Nos hemos acostumbrado al espectáculo.
Gobernar dos periodos y no más, funciona en naciones desarrollada como EU, pero ¿en RD? ¡No ombe! . Esa limitante, deben quitarla; dejar el camino abierto a otros periodos. Eso no significa triunfo automático, sino que los partidos políticos dejaran su comodidad y aprenderán a cumplir su rol observando, criticando, concientizando, actuando, para que el pueblo con su voto decida, ponga el límite, en elecciones primarias, preferenciales, nacionales.
El show de No reelección es agotador. Se pierde tiempo y recursos. Los legisladores pueden levantar o no la barrera. Sabemos que es su temporada de zafra; muchos revisan sus bolsillos y otros su conciencia; algunos se retiran. Ojalá piensen en la nación y quiten la barrera a la reelección; que el pueblo decida con su voto; que obliguen los partidos a “ponerse las pilas”.
Confió en el pueblo; ha madurado; sabe las condiciones que deben reunir los líderes para guiarlo rumbo al desarrollo integral; en quienes confiar, quiénes son demagogos, “comesolos”, quienes solo saben conceptualizar, pero no combatir la pobreza. El pueblo no se dejará manipular con discursos bonitos ni promesas falsas, tampoco venderá su voto al mejor postor. Añora lideres accesible, confiable, pisando tierra firme, pensando en los pobres, no vociferando desde las nubes.
El presidente vitalicio del PLD, Leonel Fernández, ha sido presidente de la República en tres periodos y aspira al cuarto. Otra forma de reelegirse. Vive recordando que la Constitución no permite otro periodo a Danilo Medina, miembro de su partido. Teme que la modifiquen y lo permitan; no por ese hecho en sí, sino porque teme enfrentar a Danilo; huye a la comparación con sus cualidades personales y obras sociales. Necesita impedir que aspire.
Es más fácil esgrimir la barrera legal a la no reelección, que competir con los hechos y confianza que inspira Danilo; a su manera, persigue elevar el nivel de vida del pueblo, mientras Leonel, conceptualiza sobre como modernizarlo, globalizarlo, beneficiando grupos. Con más énfasis que los partidos de oposición, Leonel obstaculiza la reelección. Si la permiten, se le dificultaría ser el candidato de su partido.
Indiscutiblemente, el permitir o no la reelección debe ser evaluado acorde con nuestra realidad. Hay muchos aspectos que ponderar. Dudo que los congresistas piensen en quitar la barrera por siempre; les conviene el show, las ofertas de las partes; buscan el mejor postor. Sin embargo, es un insulto al pueblo, desconfiar de su capacidad de elegir libremente; de alguna manera debe ser consultado. Reflexionemos.