REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Un ganadero australiano llamado Colin Deveraux mordió a un cocodrilo en el párpado para salvarse del ataque del reptil de 3,2 metros de largo. El hecho ocurrió el mes pasado mientras el hombre de unos 60 años se dirigía a levantar una valla cerca del río Finniss en el Territorio del Norte, informa ABC.
La víctima relató que se detuvo junto a un lago para observar a los peces, pero cuando comenzó a alejarse, un cocodrilo se «prendió» a su pie derecho.
«Fue un gran agarre y me sacudió como a un muñeco de trapo y volvió al agua, tirando de mí», recordó Deveraux.
Inicialmente, el hombre intentó patear al reptil en las costillas con su pie izquierdo, sin embargo, cuando eso no funcionó, optó por morder al animal.
«Estaba en una posición tan incómoda […] pero accidentalmente mis dientes atraparon su párpado. Era bastante grueso, como si estuviera mordiendo un cuero, pero tiré de su párpado hacia atrás y me soltó», recordó.
El sujeto precisó que el cocodrilo lo persiguió «tal vez unos cuatros metros» antes de detenerse, estimando que todo sucedió en unos ocho segundos.
Posteriormente, el ganadero usó una toalla y una cuerda para detener la hemorragia en su pierna antes de que su hermano lo llevara a un hospital a unos 130 kilómetros de distancia, donde ha permanecido desde entonces para recibir tratamiento.
Según el reporte, el hombre recibió un injerto de piel a principios de noviembre. Ahora puede sentir los dedos de sus pies y los médicos del centro creen que pronto podrá salir del hospital.