SAN CRISTÓBAL.- Tras los torrenciales aguaceros asociados a los remanentes de Beryl, decenas de viviendas permanecen anegadas en el barrio Moscú, en San Cristóbal, donde las lluvias acostumbran a causar estragos.
Mientras en otros sectores de la provincia, la vida comenzó a retornar a la normalidad.
Sin poder retornar a su hogar, la mujer se mantiene refugiada en el centro comunal del sector, junto a una decena de familias vecinas que también lo perdieron todo.
En el barrio, la situación es la misma que se repite cada año, debido a la falta del drenaje pluvial.
Es por eso que moradores protestaron con pancartas, en demanda de la terminación de la obra que dijeron fue una promesa de campaña del presidente Medina.
Mientras en Pueblo Nuevo y Madre Vieja Sur, las inundaciones ya cedieron para dar paso al proceso de limpieza de los ajuares.
Debido a la situación de insalubridad de las aguas, la mayor preocupación ahora de los residentes en las zonas afectadas por las inundaciones son los brotes de enfermedades que acostumbran a resurgir tras lluvias.
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