Puerto Rico.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró este lunes que Puerto Rico se merece «toda la ayuda» que el país pueda brindar y se comprometió a apoyar a la isla para que esté «mejor preparada» ante futuros huracanes.
«La gente de Puerto Rico continúa levantándose con resiliencia y determinación. Se merecen toda la ayuda que su país les pueda dar», dijo en un discurso en el puerto de la ciudad sureña de Ponce.
Biden efectúa en esta jornada una corta visita de escasas tres horas a Ponce para inspeccionar los daños causados por el reciente huracán Fiona, que llevaron a la declaración de un estado de desastre mayor.
«Vinimos en persona para mostrar que estamos con ustedes, todos los estadounidenses están con ustedes, mientras se recuperan y reconstruyen», subrayó.
El mandatario hizo un repaso a los problemas que ha afrontado la isla en estos últimos 5 años, desde el devastador huracán María de 2017, pasando por los terremotos de 2020, la pandemia de la covid-19 y, ahora, Fiona.
En su mensaje, reconoció que la isla no siempre ha obtenido ayuda a tiempo y que tras María se aprobaron millonarios fondos para la reconstrucción que tardaron en llegar.
«Nos aseguraremos que reciban cada dólar prometido. Estoy determinado a ayudar a Puerto Rico a construir más rápido que en el pasado y más fuerte y mejor preparado para el futuro», aseveró.
Biden afirmó que la reconstrucción debe ser total y «en una forma resiliente» con el objetivo de que «cuando otra tormenta venga, que vendrá, no tengamos los daños que han causado antes».
Como ya se anunció previamente, prometió más de 60 millones de dólares en fondos para asegurar diques, fortalecer muros y crear un sistema de alerta que mitigue las inundaciones en caso de huracanes.
Antes de su discurso, el mandatario fue informado brevemente del proceso de reconstrucción de la isla y las autoridades le mostraron varios mapas.
El presidente fue recibido en el aeropuerto internacional Mercedita por el gobernador Pedro Pierluisi, el alcalde de Ponce, Luis Irizarry, la comisionada residente en Washington, Jenniffer González, y la congresista Nydia Velázquez.