Los Ángeles.- El cómico Bill Cosby se negó a declarar este viernes en el caso en su contra en el que se le acusa de agredir sexualmente a una niña de 15 años, Judy Huth, en la Mansión Playboy en el año 1974.
En un juzgado en Los Ángeles, Cosby se acogió a la Quinta Enmienda de la Constitución estadounidense que concede a cualquier individuo el derecho a no testificar si sus palabras pueden ser usadas para perjudicarlo, es decir, para autoincriminarse de un delito.
Así lo informaron medios de comunicación estadounidenses al final de la audiencia celebrada en Santa Mónica, en Los Ángeles (California, EE.UU.).
En una rueda de prensa posterior, la abogada de la acusación, Gloria Allred, criticó que Cosby haya usado esta estrategia en un momento que no enfrenta cargos criminales.
Por su parte, el equipo legal de Cosby aseguró en un comunicado que su nueva abogada principal, Jennifer Bonjean, pretende que el cómico “sea absuelto por completo” en este caso, según la cadena de televisión Fox News.
La negativa del comediante a declarar llega un mes y medio después de que la Corte Suprema del estado de Pensilvania (EE.UU.) anulara una condena de abusos sexuales contra Cosby.
En 2018, el cómico fue sentenciado a prisión después de que un juez de Pensilvania lo encontrara culpable de un delito de abusos sexuales contra la canadiense Andrea Constand. Se convirtió en el primer famoso encarcelado en la era del «MeToo».
Sin embargo, la Corte Suprema de ese estado revocó esa condena en junio por un acuerdo civil previo que invalida el juicio y por el que Cosby, que reconoció los hechos, indemnizó a la víctima.
Tras su salida de la cárcel, el cómico de 83 años quiere actuar en Estados Unidos, Canadá y Reino Unido y también pretende encabezar una campaña por la «reforma de la Justicia» y el «sistema penitenciario» basada en sus propias experiencias.
Más allá de su regreso a los escenarios, el cómico tratará de rentabilizar la atención mediática que ha recibido su caso con un libro, escrito por Frederick Williams, en el que narrará su paso por la cárcel, así como las estrategias utilizadas por sus abogados.
Además, según el diario Los Angeles Times, el cineasta Michelle Major prepara un documental de cinco episodios sobre la vida del cómico.
La reputación de Cosby está muy dañada ya que nunca ha sido declarado inocente y su salida de prisión se basa en un tecnicismo legal sobre el pacto al que cómico había llegado con un fiscal del distrito de Montgomery en 2005 para anular la condena.
El actor fue condenado en 2018 a un máximo de diez años de cárcel, de los que debía cumplir al menos tres, por haber agredido sexualmente a Constand, una de las más de sesenta mujeres que han denunciado al actor.
La víctima era entonces la entrenadora de baloncesto del equipo femenino de la Universidad de Temple, donde Cosby estudió y de la que él era un importante donante.
Pero, en la sentencia de junio, la Corte Suprema de Pensilvania argumentó que Cosby no tuvo un juicio justo y no debió haber sido arrestado en 2015, cuando el nuevo fiscal del distrito de Montgomery (Pensilvania), Kevin Steele, descubrió nuevas pruebas que confirmaban que el actor había abusado de Constand.
Específicamente, lo que Steele descubrió fue un testimonio hasta entonces secreto de Cosby, en el que reconocía que daba a las mujeres unos sedantes antes de abusar de ellas.