Es imposible resistir la tentación de reproducir los oportunos consejos de Rafael Molina Morillo a Danilo Medina, publicados en su “Mis Buenos Días” del 27 de marzo, cinco días antes de morir: “Que metas en la cárcel a los ladrones y delincuentes de toda laya, oficiales o privados. Que pongas en vigor efectivo la Constitución y las leyes, con excepción de la reelección. Que hagas todo lo que haya que hacer para que los poderes Legislativo y Judicial sean realmente poderes y no cuevas de bandoleros. Hay mucho espacio para seguir enderezando al país. Pero si hay voluntad, se puede”. (¡Lástima que no le haga caso!)