Utilizarán drones y tecnología avanzada para buscar los restos de la familia Gill desaparecida hace 23 años en Entre Ríos

Tras 23 años de incertidumbre, las autoridades reactivan la búsqueda de la familia Gill en Entre Ríos, utilizando drones de alta tecnología y apoyo satelital para inspeccionar el campo “La Candelaria”.

Nogoyá.– La investigación por la desaparición de Rubén “Mencho” Gill, su esposa Margarita Gallego y sus cuatro hijos ha dado un giro tras más de dos décadas de incertidumbre.

El próximo 12 de noviembre, un equipo especializado inspeccionará el campo “La Candelaria”, en Crucesitas Séptima, con el objetivo de localizar rastros que permitan esclarecer el paradero de la familia, cuyo último registro data del 13 de enero de 2002.

La intervención judicial se realizará con métodos avanzados, combinando inspección ocular, georreferenciación y tecnología de drones de alta resolución.

Búsqueda tecnológica en Entre Ríos

Entre los recursos que se utilizarán destacan los drones DJI Matrice 300, capaces de capturar imágenes aéreas de gran detalle, que permitirán mapear las 600 hectáreas del predio y determinar zonas de interés.

Además, se contempla la posibilidad de acceder a imágenes satelitales retroactivas proporcionadas por la NASA, con el fin de identificar movimientos de tierra antiguos que podrían indicar la presencia de fosas.

Según el abogado querellante Marcos Rodríguez Allende, estos procedimientos tecnológicos son esenciales para avanzar en un caso marcado por la falta de información confiable y declaraciones contradictorias de testigos a lo largo de los años.

La causa, reactivada por orden del juez Oscar Rossi tras la solicitud de la familia, involucra a la Dirección de Investigaciones e Inteligencia Criminal de la Policía de Entre Ríos, la División Policía Científica y la División de Investigaciones de la Jefatura Departamental de Nogoyá.

Rodríguez Allende aseguró que, pese al fallecimiento del dueño del campo en 2016, es crucial renovar testimonios y recopilar toda la evidencia posible, ya que existen personas que no han sido completamente sinceras sobre los hechos.

La madre de Margarita, María Delia Gallego, sigue siendo la principal destinataria de la búsqueda, buscando respuestas que esclarezcan el destino de sus familiares.

  • La desaparición de la familia Gill ha sido un misterio desde sus primeros días. Según el testimonio del patrón para el que trabajaban, Alfonso Goette, la familia se habría marchado de vacaciones y nunca regresó, versión que los allegados rechazaron de inmediato debido a que la vivienda quedó intacta, con muebles, electrodomésticos y documentos en su lugar.

La investigación oficial avanzó con lentitud, con inspecciones y rastrillajes que, durante años, no arrojaron resultados. Solo tras la muerte de Goette y la aparición de nuevos testigos dispuestos a aportar información, el caso recuperó impulso, renovando la esperanza de que, tras 23 años, se pueda esclarecer la verdad sobre la trágica desaparición de los Gill.