China confirma el nombramiento de Pan Gongsheng como gobernador del banco central

Pan reemplaza así a Yi Gang, que había dirigido el banco central chino desde 2018.

Shanghái.- El órgano de dirección del Legislativo chino confirmó anoche el nombramiento de Pan Gongsheng como nuevo gobernador del Banco Popular de China (BPC, central), cumpliendo así con lo esperado tras su designación a principios de mes como jefe del Partido Comunista (PCCh) en la institución.

Pan, de 60 años, juró su cargo tras una sesión del Comité Permanente de la Asamblea Nacional Popular (ANP) en la que todos los focos se centraron en la destitución del hasta entonces ministro de Asuntos Exteriores, Qin Gang, quien había desparecido de la vida pública hace un mes sin explicación oficial y que fue reemplazado por su predecesor en el cargo, Wang Yi.

Según su perfil oficial, el nuevo gobernador del BPC es doctorado en económicas por la Universidad del Pueblo de Pekín, fue profesor visitante en la Universidad de Cambridge entre 1997 y 1998, y trabajó en los estatales Banco Industrial y Comercial de China (ICBC) y Banco Agrícola de China (ABC) antes de ser nombrado vicegobernador del banco central, puesto que desempeña desde 2012.

Pan reemplaza así a Yi Gang, que había dirigido el banco central chino desde 2018.

Tras su nombramiento como secretario del PCCh en el BPC, la consultora Trivium China aseguró de él que es un funcionario con experiencia en gestionar «situaciones de alto perfil y de mucha presión» como la reestructuración del ICBC (2003) y su salida a bolsa (2006) o la oferta pública inicial del ABC (2010).

En 2016, cuatro años después de su llegada al banco central, fue nombrado también director de la Administración Estatal de Divisas (SAFE).

«Todos estos cargos pudieron haber acabado con la carrera de Pan si los hubiera gestionado mal. En cambio, se construyó una reputación de ser un solucionador de problemas políticamente hábil», apuntó Trivium.

La consultora consideró que la selección de Pan como líder del BPC no representa únicamente una línea continuista con respecto a su predecesor: «Es una señal de que Pekín se ha dado cuenta de que los desafíos a los que se enfrenta su sistema financiero requieren de un gestor de crisis a la cabeza del banco central».