HATO MAYOR.- A casi una semana de registrarse el choque de una patana contra un autobús escolar que dejó dos estudiantes muertas, varios heridos y luto en toda una comunidad, hoy el chofer del vehículo pesado alega que el trágico hecho fue un accidente.
A pesar de las alegaciones del conductor Ismael Daniel Matos, una de los heridos, el estudiante Salvador Pérez, refuta sus afirmaciones y alega que Matos iba “a todo lo que da” y que nunca tocó la bocina.
Aunque el conductor dijo que trató de evadir el autobús, Peréz, que estaba sentado del lado derecho del vehículo desmintió esas declaraciones y afirmó que iba a alta velocidad en una curva.
El estudiante, que contó con la anuencia de su madre Ivón Cetty para hablar a los medios de comunicación, sostuvo que antes del accidente «estábamos parado (el autobús), el chofer no estaba manejando ni nada, estaba subiendo una estudiante».
Dijo que al ver eso «el chofer del autobús se detuvo para que la patana pase y de repente ocurrió el impacto».
«La guagua había salido, pero se paró para que la patana pase, el (chofer) la vio (la patana) y entonces se paró para darle paso, ya estaba metida encima de nosotros», indicó.
Las dos víctimas mortales en ese choque fueron Alexandra Clevel y Estefany Castillo, quienes perdieron la vida tras presentar traumas contusos.
En tanto que el Ministerio Público solicita ante el Juzgado de Paz de la provincia de Hato Mayor tres meses de prisión preventiva para el imputado Ismael Daniel Matos, de 24 años.
El conocimiento de medida de coerción se volvió a posponer, en esta ocasión para el día doce de este mes a la una de la tarde.