Bogotá.- Un total de 69 largometrajes colombianos fueron estrenados este año en las salas de cine del país, una cifra récord a la que se sumarán dos películas más que llegarán a la pantalla grande en lo que queda de diciembre.
Así lo detalló este martes el Fondo Mixto de Promoción Cinematográfica (Proimágenes), que detalló en su boletín ‘Cine en cifras’ que entre enero y noviembre «se estrenaron 12 películas colombianas más que en 2022, momento en el que registraba el número más alto».
«Por eso 2023 se convierte en un año histórico para la cinematografía nacional y se espera que finalice con 71 estrenos en total», agregó la información.
El organismo destacó que antes de que existiera el actual sistema de estímulos para la producción, en 2003, se hacían un promedio de cuatro películas al año en Colombia, cifra que entre 2014 y 2019 era de 40.
“No cabe duda de que el cine colombiano está en su momento más prolífico, todos los esfuerzos que se han adelantado desde el Estado y los diferentes actores de la cadena de valor del audiovisual nos han llevado a máximos históricos en la producción cinematográfica», expresó la directora general de Proimágenes, Claudia Triana.
Del total de películas estrenadas este año en el país andino, 27 son documentales (39 %); 26, dramas (38 %); 7, comedias (10 %), 6, de suspenso (9 %), dos, de terror (3 %), y una de animación (1 %).
Agosto fue el mes de más estrenos, con 11 títulos.
Entre enero y noviembre hubo 50,39 millones de asistentes a los cinemas, y se espera que esa cifra crezca este mes hasta los 53,4 millones.
No obstante, Proimágenes mostró su preocupación porque la asistencia a ver películas colombianas es la más baja desde 2002.
«Nos alegra mucho que los datos nos ayuden a confirmar que, en general, el cine en Colombia continúa recuperándose y reencontrándose con esas cifras que se registraban antes del duro golpe de la pandemia», afirmó Triana.
Agregó: «Sin embargo, también nos permite reiterar el gran reto que tienen las películas colombianas para llevar más espectadores a las salas a que se conecten con la abundancia de narrativas propias que estamos teniendo, y la responsabilidad de distribuidores y exhibidores para llevarlas a más pantallas en todos los rincones del país».