SANTO DOMINGO.- Frente a la ola de robos, cada vez más espectaculares, pequeños comerciantes de barrios populosos del Gran Santo Domingo han comenzado a tomar medidas adicionales a las cámaras de seguridad para evitar ser víctimas de la delincuencia.
De su lado, residentes de diversos sectores se quejan por el escaso patrullaje en sus zonas, sobre todo al amanecer o las noches, horas que aprovechan los antisociales para cometer sus fechorías.
Por la forma en que el señor Erasmo Encarnación fue víctima de un asalto en el colmado que tiene en el barrio Dos de Enero, en Sabana Perdida, se vio obligado a colocar hierros adicionales en su establecimiento.
El comerciante, que tiene más de 10 años con el negocio que sustenta a su familia, lamentó que a pesar de que entregó videos a la Policía, aun no hayan dado con los responsables del atraco, ya que le ha pasado en varias ocasiones.
Los asaltos mantienen también impotentes a residentes de Gualey, quienes aseguraron que los antisociales actúan a cualquier hora del día y sin importar cercanía con el destacamento de la zona. Los comerciantes del lugar tomaron medidas para evitar ser asaltados.
Además del uso de cámaras de seguridad y el cierre temprano de sus negocios, comerciantes de sectores como Los Tres Brazos, en Santo Domingo Este, han optado por colocar cerradura electrónica, debido a intentos de asaltos en establecimientos cercanos.
El llamado a las autoridades para que pongan mano dura a la delincuencia es unísono entre los residentes de diversos de la capital, quienes aseguraron tener temor de perder su vida durante un asalto.