SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Alejados de las grandes obras de infraestructura, debajo del puente, un grupo de yolas cumple el rol que aún no logran desarrollar los modernos, limpios y organizados sistemas de transporte colectivo, al movilizar a decenas de personas diariamente entre los barrios de Gualey y Los Tres Brazos a través de las aguas del río Ozama.
Joaquín Alcántara es uno de los usuarios de este medio transporte en el que diariamente se desplaza a de destino.
Pese al funcionamiento del Metro y el Teleférico, muchos de los residentes en la ribera del Ozama prefieren los taxis acuáticos por ahorro de tiempo y de dinero.
Son tres las pequeñas embarcaciones que en calidad de yola–taxis movilizan unas 60 personas diariamente. En algunos días, el número se eleva a 80, dependiendo de las actividades que se desarrollen a ambos lados del afluente.
José Antonio Moreno logró sacar a flote a su familia gracias a su trabajo diario como yolero, en el que ha transportado pasajeros desde hace 52 años.
Moreno destaca que incluso sus servicios llegaron a ser solicitados de noche, ante alguna emergencia.
Pese a los riesgos que representan estas frágiles embarcaciones, para muchos, es la mejor y más rápida opción para cruzar el río.
Hace unos 18 años cuatro pasajeros murieron al virarse la yola intentando cruzar el afluente.
Pese al peligro que reviste este medio de transporte, sus usuarios afirma que continuarán utilizando, mientras represente un ahorro económico y de tiempo.