Santo Domingo.-Durante el año que casi finaliza, las relaciones entre República Dominicana y Haití se mantuvieron tensas a partir del segundo semestre debido a varios conflictos nacionales y fronterizos que se generaron entre ambos gobiernos y provocaron el cierre total de la frontera y la suspensión del mercado binacional.
Pese a los constantes llamados del presidente Luis Abinader a la comunidad internacional para que vaya en auxilio de Haití, ambas naciones tuvieron diferencias que llevaron a las medidas sin precedentes, como el cierre de la frontera, el transporte y el comercio bilateral por varios meses.
El conflicto comenzó luego de que el gobierno dominicano reportó en septiembre que Haití había retomado la construcción de una canal desde el río Masacre y cuyas obras estaban paralizadas desde un encuentro bilateral en 2021.
Ante la negativa de Haití de detener la construcción, el presidente Abinader dio un ultimátum u ordenó el 15 de septiembre el cierre total de la frontera. El cierre incluyó suspensión de vuelos y cancelación de visados a ciudadanos y políticos haitianos que abogan por la continuación de la obra.
Previo al diferendo, el primer ministro de Haití, Ariel Henry, había asegurado al mandatario Abinader que la obra no contaba con el aval de su administración. Pero sus diplomáticos acudieron a organismos internacionales a defender y justificar la construcción del canal.
Pese a que el 11 de octubre el gobierno anunció la flexibilización del cierre fronterizo, con la apertura limitada del comercio y la instalación de registros biométrico, Haití mantuvo bloqué el intercambio en la zona entre Dajabón y Juana Méndez.
La tensión escaló el 7 de noviembre, cuando manifestantes haitianos se revelaron en territorio dominicano contra los patrullajes del Ejército de República Dominicana en la zona de amortiguamiento al oeste del muro fronterizo.
Solo días después, ciudadanos haitianos con militares intentaron destruir la pirámide 13 que divide ambas naciones. Esto provocó un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores, criticando también que los haitianos arriaron la bandera dominicana.
Además, como parte del bloque comercial, la Policía Fronteriza de esa nación ingresó al puente fronterizo en diciembre y destruyó mercancías compradas por haitianos para venderla en su nación.
Nuevamente, el gobierno dominicano emitió una nota diplomática de protesta. Tras la instalación de la nueva medida de seguridad en la frontera, como el registro biométrico, el presidente Abinaer aseguró que la “frontera ya no será la misma”.