Por: Hector de la Cruz
Santo Domingo.- En medio de llanto y tristeza, familiares y amigos sepultaron este lunes a una joven embarazada que fue muerta a balazos el pasado sábado en el sector Gualey de la capital.
Al escuchar el pedido de auxilio, algunas personas se acercaron a la casa de Angélica María Ramírez Hernández de 18 años, para ver lo que sucedía y fue allí cuando la vieron bañada en sangre.
“Ella hasta habló, ella iba diciendo en la guagua cuídame a mi hija. No sabemos lo que sucedió, ella estaba en la casa hasta cogiendo agua”, dijo Genara Hernández, vecina de la víctima.
Asimismo Yanela de la Rosa, también vecina expresó “en el barrio estamos en duelo, no se sabe lo que sucedió, estamos tristes y uno no sabe ni que decir”.
En la calle San Cristóbal del sector Gualey, lugar donde residía la víctima reina un hermetismo, pero el vocero de la Policía Nacional confirmó vía telefónica a Noticias SIN que recuperó un arma de fuego y que por el crimen persigue al compañero sentimental de la víctima.
Aunque los familiares no quisieron ofrecer detalles de lo ocurrido, algunos vecinos destacaron las cualidades humanas y deportivas de la occisa.
“Una niña muy sobresaliente, con notas sobre 95, muy buena no había queja de ella. En realidad súper, súper”, así calificó Mariluz Núñez, profesora de la víctima.
La joven fue asesinada el pasado sábado y según testigos, presentaba al menos un disparo en la espalda. En tanto la bebé de Ramírez Hernández, nació con vida, pero murió horas después según relataron testigos.
Vecinos que auxiliaron a la víctima aseguran que aún no salen del asombro con lo ocurrido, esperan que las autoridades aclaren el crimen.