Redacción.- Bill Gates, quien es el magnate empresarial y desarrollador de software estadounidense, es el claro ejemplo de la adicción al trabajo o workaholism, quien además decía “elige un trabajo que te guste, y no volverás a descansar ni un solo día de tu vida”.
La adicción al trabajo o workaholism no solo resulta ser un aspecto que entorpece nuestra plenitud diaria, sino que es una enfermedad potencialmente peligrosa, como cualquier adicción. Es importante distinguir que no se trata de pasar mucho tiempo en el trabajo, algo que suele pasarle a muchos, sino que convierten el trabajo en una vía de escape.
Esta adicción es una alteración en el funcionamiento de tipo comporta mental y emocional, que a diferencia de la adicción química a una droga, la adicción al trabajo no tiene una “substancia” de la que se depende sino de la realización compulsiva o sin control de una actividad particular: trabajar.
Una investigación publicada en la National Library of Medicine menciona la importancia que tiene el cuidado de los trabajadores para no caer en prácticas de adicción al trabajo. Además de los evidentes costos físicos y mentales para los individuos, la disminución en la productividad y vitalidad de los empleados puede mermar la producción de las organizaciones a largo plazo.
Otro artículo, dirigido por una psicóloga de la Universidad de Bergen en Noruega, encontró en su estudio «Workaholic: una visión general y el estado actual de la investigación» que la adicción al trabajo es causada por múltiples factores. De ese modo, es difícil dar una explicación generalizada de sus orígenes, pero mantiene que como punto de partida están los conflictos entre la vida laboral y la familiar.
De acuerdo con una investigación disponible en Annual Reviews, se ha encontrado que la adicción al trabajo es una condición patológica que tiene consecuencias no solo en el adicto, sino en su entorno. Esto tiene el potencial de afectar la productividad y éxito del individuo, aunque se aclara que en diversos casos la persona adicta al trabajo no pierde productividad y que vive pensando en que la relación e
La mayoría de los estudios sostienen que las características de un workaholic, una persona con adicción al trabajo, pueden agruparse en las siguientes categorías:
—Tendencias compulsivas: trabajan intensamente y tienen dificultades para relajarse.
—Necesidad de tener el control total.
—Incapacidad para delegar tareas y para trabajar en equipo. Los demás no lo van a hacer tan bien, lo tengo que hacer todo yo.
—Malestar intenso cuando no obtiene el rendimiento esperado, no controla la situación o las cosas no son como él esperaba.
—Escasas relaciones interpersonales con los compañeros fuerzo-recompensa es suficiente para mantener su ritmo.