Generar un proceso de formación política que involucre y atraiga a los jóvenes –sobre todo a los segmentos más instruidos y conectados a los avances tecnológicos—es más que una cuestión de técnicas y medios de acceso al conocimiento. Hay que tomar en cuenta la cultura de la interactividad, horizontalidad e inmediatez/celeridad en las prácticas de producción y consumo de información que caracterizan a la juventud de estos inicios del siglo XXI.
Más importante aun es entender los avances en las concepciones del aprendizaje: hoy de lo que se trata es del aprendizaje significativo, que suele estar guiado por la necesidad de descubrir, por el asombro, así como por la provisionalidad de lo sabido y las múltiples posibilidades de contrastación de datos, fuentes, etc.
El lanzamiento de una iniciativa de vasto alcance en materia de formación política por parte del Partido de la Liberación Dominicana, tenemos que concebirlo y diseñarlo como una red de aprendizaje horizontal. Una serie de nodos de circulación de criterios y valores entre los participantes en dicha red, que enfatice la actitud abierta, dinámica, interactiva, entre ellos. Si no tomáramos eso en cuenta haríamos un esfuerzo anacrónico, que no va a «encantar» a la juventud o por lo menos no a los segmentos más dinámicos de ésta.
La red de aprendizaje a construir debe basarse en la problematización: una serie de preguntas generadoras por cada tema y un proceso compartido de exploración de referencias y reflexiones. No se trata adoptar una doctrina como algo terminado, sino de proveer indicaciones y ejemplos del caudal del pensamiento de Juan Bosch y otras referencias importantes en el acervo del PLD.
Sobre la base de conceptos clave y de una ingeniosa selección de preguntas guía, siguiendo el ejemplo del proceso metodológico de Bosch, los y las jóvenes abordarían la discusión y construcción de una forma actualizada de conocimiento, de hallazgo, de fijación de acuerdos.
En otro artículo me referiré a cambios en el rol de los instructores, motivadores y guías de este proceso de construcción de conocimiento en red para la formación política.