REDACCIÓN.- Los síndromes mielodisplásicos son un grupo de trastornos causados por células sanguíneas mal formadas o que no funcionan correctamente, cuyo tratamiento consiste en retardar la enfermedad, aliviar los síntomas y prevenir complicaciones.
Las medidas más comunes para tratar este trastorno incluyen transfusiones de sangre y medicamentos para estimular la producción de células sanguíneas. En ciertas situaciones, se puede recomendar el trasplante de médula ósea, también conocido como trasplante de células madre, para reemplazar la médula ósea por otra médula ósea sana de un donante. Asimismo, los síndromes mielodisplásicos son producto de los resultados incorrectos en el material esponjoso dentro de los huesos donde se producen las células sanguíneas (médula ósea).
El pasado lunes, el presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, informó que tras someterse a una aspiración y biopsia de la médula ósea, que fue diagnosticado con «síndrome mielodisplásico de riesgo intermedio».
Cortizo señaló que el análisis de estas muestras fue hecho por un laboratorio especializado en Estados Unidos por recomendación de sus médicos, tras presentar una disminución de la hemoglobina y en el conteo de los glóbulos blancos en un examen de sangre practicado en mayo pasado.
El 16 de junio pasado, el presidente y la primera dama, Yazmín Colón de Cortizo, fueron informados del diagnóstico sobre el síndrome mielodisplásico de riesgo intermedio por los doctores Franceschi y Díaz, de acuerdo a un comunicado de la Presidencia de la República.
· Fatiga
· Falta de aire
· Piel inusualmente pálida (palidez) producida por un recuento sanguíneo bajo (anemia)
· Presencia de hematomas o sangrado inusuales o que se producen con facilidad, provocados por un bajo recuento de plaquetas sanguíneas (trombocitopenia)
· Manchas rojas del tamaño de una cabeza de alfiler justo debajo de la piel, producidas por el sangrado (petequias)
· Infecciones frecuentes producidas por un bajo recuento de glóbulos blancos (leucopenia)
La Organización Mundial de la Salud divide los síndromes mielodisplásicos en subtipos según el tipo de células sanguíneas en cuestión: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
· Síndromes mielodisplásicos con displasia unilinaje. Un tipo de célula sanguínea (glóbulos blancos, glóbulos rojos o plaquetas) tiene recuento bajo y aspecto anormal en el microscopio.
· Síndromes mielodisplásicos con displasia multilinaje. En este subtipo, dos o tres tipos de células sanguíneas son anormales.
· Síndromes mielodisplásicos con sideroblastos anillados. Este subtipo presenta un recuento bajo de uno o más tipos de células sanguíneas. Un rasgo característico es que los glóbulos rojos existentes en la médula ósea contienen un anillo de exceso de hierro.
· Síndromes mielodisplásicos con anomalía cromosómica aislada del(5q). Las personas con este subtipo tienen un bajo recuento de glóbulos rojos, y las células tienen una mutación específica en su ADN.
· Síndromes mielodisplásicos con exceso de explosiones. En este subtipo, cualquiera de los tres tipos de células sanguíneas (glóbulos rojos, glóbulos blancos o plaquetas) podría tener un recuento bajo y aspecto anormal en el microscopio. En la sangre y la médula ósea, se encuentran células sanguíneas muy inmaduras (blastos).
Síndromes mielodisplásicos, no clasificados. En este subtipo, hay recuentos reducidos de uno o más tipos de células sanguíneas maduras y las células tienen aspecto anormal en el microscopio. A veces, las células sanguíneas tienen aspecto normal, pero el análisis podría encontrar que las células tienen cambios en el ADN que están relacionados con síndromes mielodisplásicos.
· Edad avanzada. La mayoría de las personas con síndromes mielodisplásicos son mayores de 60 años.
· Tratamiento previo con quimioterapia o radiación. La quimioterapia o radioterapia, los cuales se usan frecuentemente para tratar el cáncer, pueden aumentar el riesgo de tener síndromes mielodisplásicos.
· Exposición a ciertas sustancias químicas. Las sustancias químicas, incluido el benceno, se han relacionado con los síndromes mielodisplásicos.
· Anemia. La disminución en la cantidad de glóbulos rojos puede causar anemia, lo cual suele hacer que te sientas cansado.
· Infecciones recurrentes. El tener muy pocos glóbulos blancos aumenta el riesgo de contraer infecciones graves.
· Sangrado que no para. La falta de plaquetas en la sangre para detener el sangrado puede generar sangrado excesivo.
· Mayor riesgo de padecer cáncer. Algunas personas con síndromes mielodisplásicos con el tiempo pueden desarrollar cáncer de médula ósea y de las células sanguíneas (leucemia).