Redacción.- Un ambiente de consternación se vive este jueves en dos localidades de Santiago por la muerte a balazos en Estados Unidos de tres niños originarios del sector Puñal a manos de su padrastro, oriundo de La Otra Bandas, y quien también se suicidó.
La abuela materna de los menores reveló que sus nietos le aseguraban por teléfono que el victimario los amenazaba con matarlos.
Aferrada a los juguetes que dejaron sus nietos en la habitación donde durmieron hasta el 16 de septiembre del 2021, cuando viajaron a Estados Unidos, Ivelisse Rodríguez insiste que no sabe cómo logrará vivir de ahora en adelante.
Recuerda que sus nietos, a quienes crió desde que nacieron, la llamaban diariamente por teléfono antes de ir a la escuela y antes de dormir desde Georgia, a donde se habían ido a vivir con su mamá.
Recuerda entre llantos que además de amorosos, sus nietos soñaban con un buen futuro para ayudarla a ella y a su hija Karina, madre de los niños.
Rodríguez insiste entre llantos que sus propios nietos le habían revelado los maltratos físicos y verbales de los que eran objeto por parte de su padrastro José Plasencia, quien incluso los amenazaba de muerte.
Los cuerpos baleados de los hermanos Arriany, Shadal, y Carlos Michel, de 13, 11 y nueve años, respectivamente, fueron encontrados dentro de un vehículo junto con de su padrastro, de 47 años, cerca de un parque en el condado de Gwinnett.
De acuerdo con las autoridades estadounidenses, Placencia cometió la masacre, aprovechando que la madre de las víctimas estaba en el hospital, cuidando al niño que había procreado con él.
Parientes de Placencia, en el sector Villa Liberación, en La Otra Banda, aseguran que su familiar amaba a esos niños y trabajó para llevarlos junto a su madre a vivir a Estados Unidos.
Sin embargo reconocen que su actitud agresiva aumentó cuando la madre de los menores decidió ponerle fin a la relación.
Los cuerpos de los tres niños serán repatriados al país donde se le dará sepulta.
