SANTO DOMINGO.- La propuesta para formalizar el trabajo doméstico, anunciada por el ministro de Trabajo, desata aún antes de comenzar las consultas públicas, una controversia entre quienes defienden ese sector y quienes consideran que representaría una carga al bolsillo de las familias de la clase media.
Pese a que ve cómo un aliciente que en el país se comience a dignificar el trabajo doméstico,, la presidenta de la Asociación de Trabajadoras del Hogar, no está de acuerdo con que se celebran vistas públicas, para mejorar las condiciones de estas empleadas.
Un salario mínimo, horario laboral, vacaciones e inclusión en la seguridad social, es lo que busca la propuesta, a través de un contrato que mejore las relaciones laborales.
Tras destacar que son alrededor de unas 385 mil trabajadoras domésticas y que componen el cinco por ciento de la población económicamente activa del país, la presidenta de este gremio lamentó que aún siguen siendo el sector más vulnerable.
En tanto, la Asociación de Amas de Casa favorece la resolución pero la considera como un arma de doble filo, ya que muchas familias no podrán cumplir con las nuevas normativas, lo que se podría traducir en desempleo para miles de domésticas.
Entre los congresistas desde ya, el tema trae controversia, mientras algunos consideran que es un tema delicado el cual hay que estudiarlo minuciosamente, otros critican el trato que algunos empleadores dan a las asistentes del hogar.
Para la propuesta de resolución, el Ministerio de Trabajo celebrará consultas públicas; discusiones que tendrán una duración de 25 días.
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