SANTO DOMINGO.- El Plan Nacional de Seguridad anunciado por el presidente Abinader, que contempla un desarme voluntario de la población a partir del 6 de abril, provocó posiciones encontrados en diversos sectores de la sociedad civil, algunos de los cuales criticaron la falta de innovación de las medidas que ya en otras ocasiones han sido aplicadas sin éxito.
El hecho de que el Gobierno pretenda recompensar a los ciudadanos para que entreguen voluntariamente las armas ilegales a fin de reducir las muertes y hechos de violencia como planteó el presidente Abinader, fue recibido con escepticismo por ciudadanos y miembros del opositor PLD.
Simeón durán, motorista, dijo “con eso no se resuelve nada, aquí lo que tienen es que poner operativo en cada esquina”.
Sigfrido Pared Pérez, ex director DNI, expresó “eso es, no vamos a decir imposible, pero es muy difícil. Naturalmente, hay armas ilegales que no la tienen los delincuentes, entonces si por lo menos podemos sacar una parte de las armas ilegales, bueno, ya es un paso de avance. Lo que hay que evitar es que un arma ilegal llega a los delincuentes”.
«Eso es, no vamos a decir imposible, pero es muy difícil. Naturalmente, hay armas ilegales que no la tienen los delincuentes, entonces si por lo menos podemos sacar una parte de las armas ilegales, bueno, ya es un paso de avance. Lo que hay que evitar es que un arma ilegal llega a los delincuentes»., manifestó Sigfrido Pared Pérez, ex director DNI.
Desde Finjus consideraron que el desarme voluntario de civiles es viable para combatir la delincuencia y la criminalidad, pero aseguraron que requerirá de voluntad política y ciudadana.
«Es importante de que el Gobierno haya diseñado como política esa, porque cuando tú te vas a las estadísticas, las armas de fuego se han convertido en la principal herramienta para las estructuras criminales», sostuvo Servio Tulio Castaños Guzmán.
La iniciativa de identificar a los motoristas mediante un chaleco numerado también generó reacciones encontradas en el sector. Aunque motoconchistas aseguraron que no se oponen a esa medida, manifestaron pocas expectativas respecto a su eficacia en la lucha contra el flagelo de la criminalidad.
Jorge encarnación, motoconchista, expresó “aquí todo el mundo sabe quién es quién. Un chaleco no va a decidir quién es ladrón y quién no es ladrón, porque yo soy ladrón, un ejemplo, y no tengo fichas, y voy y me dan mi chaleco normal y sigo robando, porque no tengo ficha. Cómo se combate la delincuencia, con oportunidad para el pobre”.
Según las cifras del Gobierno, sólo 50 mil armas cuentan con permiso para su tenencia de las más de 238 mil registradas en el país.
Los ciudadanos destacaron como un aspecto positivo de la estrategia de seguridad que se trabaje en la modernización de la policía a los fines de dejar atrás, de una vez por todas, la antigua práctica de recibir denuncias en mascotas.
Declaraciones íntegras
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