BAGDAD.- Al menos cuatro misiles impactaron este viernes en la base militar K1, en el oeste de la norteña provincia de Kirkuk y donde se encuentran asesores estadounidenses de las fuerzas de seguridad, y causaron heridas a un soldado del Ejército iraquí.
El coronel de la Policía de la provincia de Kirkuk, Amar al Yabri, aseguró a Efe que «cuatro proyectiles de mortero» impactaron en la base militar y «causó heridas a un soldado».
La fuente añadió que las fuerzas de seguridad han iniciado una búsqueda de los responsables y han lanzado una investigación sobre el incidente, aunque aseguró que por el momento «ninguna persona ha sido detenida».
Por su parte, la Célula de Comunicación de Seguridad de Irak informó en un escueto comunicado que «varios misiles» cayeron dentro de la base militar K1 de Kirkuk, sin ofrecer más detalles
Al Yabri dijo a Efe que dentro de la base se encuentran sedes de batallones antiterroristas, la Quinta División de la Policía Federal, la Brigada 61 del Ejército iraquí y asesores estadounidenses que prestan apoyo a las fuerzas de seguridad.
Las bases militares iraquíes con presencia de asesores o fuerzas estadounidenses han sido en los últimos meses blanco de ataques con proyectiles de mortero o misiles, aunque ningún grupo los ha reivindicado hasta el momento.
Sin embargo, Estados Unidos ha acusado en distintas ocasiones a las milicias proiraníes que operan en Irak de estos ataques y ha exigido al Gobierno iraquí reforzar la seguridad para proteger a sus tropas.
El pasado 3 de diciembre al menos cinco misiles impactaron sin causar víctimas en la base estadounidense de Ain al Asad, en la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak, una semana después de que el de que el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, visitase las instalaciones.
A mediados de noviembre, al menos 17 proyectiles fueron lanzados contra la base militar de Al Qayara, donde hay fuerzas estadounidenses que colaboran con las iraquíes en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
En las provincias de Diyala (este), Kirkuk, Saladino y Nínive (norte) todavía hay presencia de células terroristas, que se esconden en áreas montañosas o terrenos agrícolas.