Desempleo en América Latina sube por desaceleración económica

Foto de archivo

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MÉXICO.– La Organización Internacional del Trabajo (OIT) advirtió este jueves que la desaceleración económica en América Latina y la recesión que sufren algunos países está provocando un aumento del desempleo y una disminución de la calidad de los trabajos, aunque el fenómeno no es homogéneo.

Durante su participación en la inauguración de la XIX Conferencia Interamericana de Ministros de Trabajo (CIMT) en el balneario mexicano de Cancún, el director para las Américas de la OIT, José Manuel Salazar-Xirinachs, informó que 2015 cerrará con un aumento de 0,6 puntos porcentuales de la tasa de desempleo en la región.

«El año pasado el desempleo urbano promedio en la región había alcanzado mínimos históricos del 6 por ciento. Para 2015 nuestras estimaciones indican que podría subir hasta al menos 6,6, aunque muy lejos de las tasas de cerca del 12 % que se han visto en el pasado», señaló.

Para Salazar, «un aumento de desempleo es muy preocupante» y «es solo la punta del iceberg», pues «la desaceleración también alcanza a la calidad de los empleos», algo que se está reflejando en la pobreza, la cual «impactará sin duda en diversas formas tanto a sectores más vulnerables como a las clases medias».

Lamentó que «luego de importantes progresos» entre 2002 y 2013, los países de América Latina y el Caribe hayan entrado «en una nueva etapa del ciclo económico caracterizada por la desaceleración».

Sin embargo, aclaró que «la situación no es homogénea», pues «algunas economías expresan una tasa de crecimiento relativamente más alta, otras están más golpeadas por la caída de la demanda de los precios de los productos primarios y otros están en abierta recesión o contracción».

Según Salazar, «en contraste con la crisis del 2008 y 2009, esta es una desaceleración de ciclo largo» y «no parece factible esperar una rápida recuperación basada simplemente en políticas macroeconómicas tales como el estímulo fiscal y monetario», una salida que «para algunos países es más limitada» que entonces.

«No se pueden seguir postergando enfrentar los problemas de más largo plazo, más estructurales que nos han caracterizado por décadas», advirtió a los ministros de Trabajo presentes en la conferencia.

Entre esos factores, citó «la heterogeneidad estructural, la insuficiente diversificación productiva, las brechas de productividad entre y dentro de los países, las deficiencias de capital humano en materia de educación y formación para el trabajo».

También «la alta incidencia de informalidad y pobreza, la herencia histórica de alta desigualdad y exclusión, y persistentes brechas en respeto de aplicación de derechos laborales».

Además de Salazar, en la sesión inaugural intervinieron el ministro de Trabajo de Colombia y presidente de la XVIII CIMT, Luis Eduardo Garzón, el secretario del Trabajo y Previsión Social de México, Alfonso Navarrete, y el secretario ejecutivo para el Desarrollo Integral de la Organización de Estados Americanos (OEA), Neil Parsan.