SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El devastador accidente ocurrido hace dos semanas en la carretera Sánchez-Nagua, donde 18 personas fallecieron y 12 resultaron heridas, ha desatado un debate sobre las condiciones en que circulan los vehículos pesados en el país.
En este caso, el chofer de un camión marca Mack, con neumáticos completamente deteriorados, invadió el carril contrario, por el que transitaba un Daihatsu, en cuya cama viajaba un grupo de personas tras concluir un culto religioso.
¿Cuál es el talón de Aquiles? ¿La ley, las autoridades, los sindicatos o los choferes de estos vehículos pesados que a veces se convierten en una desgracia sobre ruedas?.
Vigilar permanentemente las principales autopistas del país, es la meta a la que aspira la AMET. Según su vocero de la institución, en la autopista Duarte ya detectaron 14 puntos vulnerables. Levantamientos similares también son realizados en las Américas, en la autovía del Este y en la del Coral.
En estos casos, la AMET asegura que trabaja en coordinación con las concesionarias que rigen estas autopistas, así como con el Ministerio de Obras Publicas que tiene para estos fines, más de doscientas camionetas en todo el territorio nacional.