REDACCIÓN.- El religioso de 42 años está en prisión preventiva desde el jueves, tras una investigación basada en cuatro denuncias, la primera de ellas de agosto de 2021, según señaló la Policía Civil en una nota.
El agresor se valía de su posición para “practicar abusos sexuales” durante los cultos y encuentros pastorales que realizaba en localidad de Confresa, en Mato Grosso, estado fronterizo con Bolivia.
La investigación desgranó el modus operandi del pastor, quien, durante la oración, decía que “tenía que pasar aceite ungido en las partes íntimas” de las feligresas bajo la excusa de que “alguien había hecho magia negra”.
Era entonces cuando conducía a sus víctimas, mayores y menores de edad, a otro cuarto de la iglesia, donde les aplicaba el aceite por todo el cuerpo y “practicaba los abusos”, de acuerdo con las autoridades.
En algunos de esos encuentros privados, el religioso también “mostraba sus genitales y los manoseaba”, según indicaron a fuentes de la Policía Civil de Mato Grosso, que no descartan la existencia de más casos de abusos.
Una de las denunciantes, de 17 años, relató que en febrero de este año fue hasta la iglesia evangélica para orar junto con el pastor y éste la llevó al baño, donde le administró el aceite y le pidió que hiciera lo mismo con él.
“En la secuencia, el investigado untó el aceite por el cuerpo de la víctima, que comenzó a sentirse aturdida. Entonces, el sospechoso le quitó el vestido y realizó actos sexuales”, apuntó la Policía.
Con otra de las mujeres agredidas, también adolescente, llegó a hacer una videollamada en el que “aparecía manipulando y exhibiendo su órgano genital”, de acuerdo con la información oficial.