MÉXICO.- El dominicano Leandro Castro, jardinero izquierdo de los campeones Toros de Tijuana, fue elegido este martes como el Jugador Más Valioso de la temporada 2021 de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB).
«Leandro Castro arrasó con más del 65% de los votos emitidos por la prensa y por los 18 clubes de la LMB para ser el jugador más valioso de la temporada 2021», informó el circuito en una nota de prensa.
El oriundo de La Romana se impuso en la votación a figuras como Addison Russell, campo corto de los Acereros de Monclova y ganador de la Serie Mundial en 2016 con los Cachorros de Chicago y a su compatriota Rainel Rosario, de los Saraperos de Saltillo, líder de cuadrangulares en la campaña.
Castro fue una de las claves que le dieron a los Toros el segundo título de su historia. El caribeño participó en 64 encuentros de 65 del rol regular, fue el pelotero con más imparables, con 93, y con más carreras producidas, 72.
Además, Castro fue tercero en extrabases, con 36, sexto en promedio de bateo con .378 y duodécimo en cuadrangulares con 14.
En su cuarta temporada en la LMB, Castro se consolidó no sólo como un jugador fiable con el bate y a la defensiva, sino como un líder en el terreno de juego, aseguró el asesor deportivo de la presidencia de Toros de Tijuana, Óscar Romero.
«Tuvo liderazgo no sólo en su conducta sino también con hechos, se puso la camiseta y se identificó con el equipo. Leandro tuvo su consolidación como pelotero en México, estamos muy contentos con él, esperamos se mantenga igual para 2022», señaló.
Romero consideró que el dominicano vivió en 2021 su mejor temporada en la LMB ya que fue uno de los jugadores de Tijuana que respondió a la hora cero.
«El producir carreras es una labor complicada para los peloteros ya que es cuando los lanzadores tiran con mayor inteligencia, tienen más cuidado y no regalan nada», añadió Romero.
Castro se une a su compatriota Fernando Rodney, nombrado relevista del año, como los ganadores de premios en la temporada 2021 de los campeones Toros.
En septiembre, Tijuana se repuso de tres derrotas al hilo en la serie final ante los Leones de Yucatán y logró cuatro victorias en fila para proclamarse como los campeones.
Fue la segunda vez que en la LMB se dio una hazaña de tal magnitud, la primera fue en 1971 cuando los Charros de Jalisco fueron el primer conjunto de la LMB en remontar un 3-0 en una final.